Rusia insiste en la táctica de desgaste mientras Ucrania se afianza en el Dniéper
Kiev/Moscú, 14 ene (EFE).- Rusia insiste en su táctica de desgaste de Ucrania a lo largo de la línea del frente mientras Kiev trata de afianzarse en la ribera izquierda del Dniéper, donde mantiene una cabeza de playa.
"Rusia se ha estado preparando para la guerra durante varias décadas y ha acumulado muchas armas", reconoció hoy en su canal de Telegram la ex viceministra de Defensa de Ucrania Hanna Maliar, según la cual, el objetivo del Ejército ruso radica en "agotarnos lo más posible".
Agotar al Ejército ucraniano
Esta presión, según Maliar, tiene como fin impedir a Ucrania crear reservas de municiones, reparar su equipamiento bélico dañado y bajar la moral del Ejército.
"Actúan para que no tengamos tiempo de recuperarnos. Mientras tanto (..) se están preparando para la siguiente etapa de acciones agresivas", alertó.
Añadió que "los ocupantes harán todo lo posible para presionar" a Avdivka (bastión ucraniano de la región de Donetsk) y llegar a Kúpiansk (en la región de Járkiv).
"Para ellos, esto es importante no tanto en el sentido militar, sino con fines de propaganda y apoyo moral a su propio ejército", estimó, al reconocer que el avance ruso en el este del país se mantiene "al mismo ritmo que en otoño", pese a que el Ejército ucraniano resiste encarnizadamente.
Con el fin de desgastar al Ejército ucraniano, indicó, "los rusos utilizan tácticas de pequeños grupos de asalto" semejantes a los usados por el grupo de mercenarios rusos Wagner, ya que Ucrania gasta prácticamente la misma cantidad de pertrechos para repeler el ataque de un grupo pequeño que para rechazar un grupo mayor.
En tanto, las tropas ucranianas precisan urgentemente de refuerzos, declaró hoy a la televisión pública el comandante de la Quinta Brigada de Asalto del Ejército ucraniano, Oleksí Tarasenko.
"Las tropas esperan con ansia nuevos refuerzos, porque en muchas zonas, en muchas unidades, la situación del personal es bastante crítica y la calidad de los efectivos que llegan deja mucho que desear", afirmó.
Explicó que la edad media de los militares ucranianos supera los 40 años, "personas de edades avanzadas con muchos problemas" de salud y escasa preparación militar.
A fines del año pasado, el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, informó de que el Ejército pidió reclutar 500.000 personas en las fuerzas armadas, pero hasta el momento el Parlamento no ha aprobado la nueva ley de movilización que daría luz verde a esta campaña.
Combates por la rivera izquierda del Dniéper
Por su parte, el Ministerio de Defensa ruso informó que durante la jornada el Ejército ruso había repelido ocho ataques ucranianos en tres sectores del frente: en Kúpiansk, en Limán (en la región de Lugansk) y en le sector de Donetsk.
A su vez, el Estado Mayor del Ejército ucraniano indicó que en las últimas 24 horas las fuerzas ucranianas repelieron cuatro ataques enemigos en Sinkivka (sector de Kúpiansk) y cuatro en Lugansk y Donetsk, mientras que en Avdivka, ciudad que los rusos intentan cercar desde hace tres meses, rechazaron una veintena de ataques.
Sin embargo, uno de los sectores de mayor intensidad de combate es el de Jersón, en la margen izquierda del río Dniéper, donde las fuerzas ucranianas lograron sentar una cabeza de playa y resisten al denso fuego ruso.
"Nos esforzamos en afianzar y ampliar la cabeza de playa, y el enemigo trata de expulsar nuestras unidades. Ya casi no casi no quedan casas intactas, trabajan las artillerías de ambos lados. Además, el enemigo bombardeó intensamente la zona", declaró a la televisión ucraniana la portavoz del Mando Sur de Ucrania, Natalia Gumeniuk.
En este sector del frente, señaló, Rusia puede haber concentrado alrededor de 10.000 efectivos, con el objetivo de mantener el control de esta zona.
(c) Agencia EFE