Rusia devuelve a Ucrania tres buques que confiscó en el mar Negro hace un año

MOSCÚ (AFP).- Las autoridades rusas devolvieron a Ucraniatres buques militares confiscados hace un año. La devolución se interpretó como un gesto de buena voluntad por parte de Moscú, a tres semanas de una cumbre que se celebrará en París y que podría aportar una solución del conflicto en el este de Ucrania.

Los barcos fueron confiscados por los guardacostas rusos en noviembre de 2018 frente a Crimea, territorio ucraniano incorporado por Moscú en 2014, donde se desató el primer enfrentamiento armado directo entre ambas naciones.

Ucrania confirmó haber recibido los navíos, pero no detalló el destino al que serán derivadas. Las cañoneras "Nikopol y Berdiansk, y el remolcador Iani Kapu se dirigen hacia la parte continental de Ucrania", indicó la marina ucraniana.

En 2018, Moscú acusó a los navíos de ingresar ilegalmente en sus aguas territoriales en el Mar Negro, cerca del estrecho de Kertch, que conduce al Mar de Azov. Por eso, la guardia costera rusa capturó a 24 marineros ucranianos, de los cuales tres resultaron heridos. Los marineros fueron liberados en un intercambio de prisioneros en septiembre, en el que también se liberó al cineasta ucraniano Oleg Sentsov y se entregó a Moscú a un sospechoso en la destrucción en espacio aéreo de Ucrania del vuelo MH17 en julio de 2014.

La entrega de los barcos es el tercer acontecimiento interpretado como una señal de distensión de las relaciones entre los dos países desde la elección en abril del presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, que se manifestó como favorable a un relanzamiento del diálogo.

Además del intercambio de prisioneros, el 9 de noviembre se retiraron tropas ucranianas y de combatientes separatistas prorrusos en tres zonas de la línea de frente en el este, donde se desató el conflicto que dejó más de 13.000 muertos.

En tanto, el 9 de diciembre se realizará en París una cumbre donde se encontrarán Zelenski y el presidente ruso, Vladimir Putin, con su par francés, Emmanuel Macron y la canciller alemana, Angela Merkel. Sin embargo, el Kremlin confirmó el encuentro y pidió no tener expectativas "exageradas".

Para Moscú, la resolución del conflicto en el este ucraniano pasa por la adopción de un estatuto de autonomía para los territorios separatistas de Lugansk y Donetsk, sumado a la celebración de elecciones en esas regiones rusoparlantes y fronterizas con Rusia. Para Kiev, el requisito previo para una votación es el control de sus fronteras, el desarme de los rebeldes y la salida de los rusos que los apoyan.