Rusia asumió la presidencia del Consejo de Seguridad y Ucrania lo definió como un “mal chiste”

Vladimir Putin, en la Asamblea de la ONU
Vladimir Putin, llegando a una Asamblea de la ONU en Nueva York (Archivo) - Créditos: @EFE

NUEVA YORK.- Rusia asumió este sábado la presidencia del Consejo de Seguridad de la ONU, encargado de mantener la paz y la seguridad del mundo, en medio de la invasión a Ucrania y con su presidente acusado de crímenes de guerra, un irónico giro que provocó una amarga respuesta del gobierno ucraniano.

El canciller ucraniano, Dmytro Kuleba, calificó en su cuenta de Twitter como un “mal chiste” que Rusia asuma la presidencia del Consejo este 1 de abril, mientras su brutal invasión de Ucrania se prolonga por segundo año.

“La presidencia rusa del Consejo de Seguridad de la ONU es un claro recordatorio de que algo va mal en el funcionamiento de la arquitectura de la seguridad internacional. Un Estado que arruina sistemáticamente la paz y la seguridad internacionales presidirá el órgano encargado de mantenerlas”, dijo en otro tuit.

La presidencia del Consejo de Seguridad rota alfabéticamente entre sus 15 países miembros. El órgano está controlado por sus cinco miembros permanentes, entre ellos Estados Unidos y Rusia.

Según señaló CNN, el cuerpo diplomático de la ONU es muy consciente del escepticismo de la opinión pública ante el hecho de que Rusia dirija el consejo mientras sus tropas ocupan partes de Ucrania, otro país miembro de la ONU.

Se supone que un presidente del Consejo de Seguridad debe permanecer neutral. Pero en su nuevo papel, Rusia puede maniobrar en las reuniones sobre Ucrania y utilizar el mes a su favor.

El canciller ruso, Serguei Lavrov, tiene previsto por ahora presidir una reunión sobre “multilateralismo efectivo”, a finales de este mes. También se anunció que Lavrov dirigirá un debate sobre Medio Oriente el 25 de abril.

Abuso de poder

“Insto a los miembros actuales del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas a frustrar cualquier tentativa de Rusia de abusar de su presidencia”, insistió Kuleba, el primer día en que Moscú asume la dirección del Consejo. Rusia tendrá de hecho poca influencia en las decisiones, pero estará a cargo de la agenda.

Estados Unidos criticó el papel de Rusia, así como el hecho de que sea miembro permanente del Consejo. “Un país que viola la Carta de la ONU de manera flagrante y que invade a su vecino no tiene sitio en el Consejo de Seguridad de la ONU”, dijo la vocera de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre.

“Desgraciadamente, Rusia es miembro permanente del Consejo de Seguridad y no existe ninguna vía jurídica internacional viable para cambiar esa realidad”, añadió, calificando la presidencia de “cargo en gran medida ceremonial”.

Ucrania continuó este sábado buscando soluciones para mantener a raya a los rusos, en este caso con el encargo de 100 vehículos blindados Rosomak, fabricados en Polonia bajo licencia finlandesa, que serán financiados por la Unión Europea y Estados Unidos.

“Traigo el pedido de ayer del primer ministro ucraniano, Denis Chmigal, de 100 Rosomak que serán fabricados aquí”, dijo el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecki, en la planta de producción de estos vehículos en Siemianowice Slaskie, en el sur de Polonia.

El pedido se financiará con fondos europeos concedidos a Polonia y con fondos estadounidenses obtenidos por Ucrania, indicó el jefe del gobierno polaco, sin precisar el importe del contrato.

Rosomak es un vehículo blindado multifuncional de ocho ruedas con licencia de la finlandesa Patria.

Agencias AFP y ANSA