Le roban a un sacerdote durante la misa

Le roban a un sacerdote durante la misa

El sacerdote José Luis Rey celebró la misa con normalidad, como lo hace todos los días. Después saludó a los fieles y se fue a la casa parroquial para terminar el domingo. Pero cuando llegó a su habitación advirtió que le habían robado su computadora portátil, un equipo de música y dinero que había en una billetera. Todo sucedió sin que nadie lo advirtiera. El hecho ocurrió el domingo pasado en la casa parroquial de la iglesia San Martín de Porres, situada en el barrio de Belgrano. Así lo informaron a La Nacion fuentes de la Policía Federal y un empleado de la secretaría parroquial. La misa comenzó a las 20.15, es decir que el robo tuvo que haber sido entre esa hora y la finalización de la celebración del cura párroco, conjeturaron los investigadores. La parroquia está en Virrey Loreto 2161. La entrada de la casa donde vive el sacerdote queda por Arcos al 1500, a la vuelta de la iglesia. Al cierre de esta edición el cura párroco no había ratificado la denuncia en la comisaría 33a., con jurisdicción en la zona, que comenzó una investigación de oficio. "El cura advirtió los faltantes cuando regresó a su casa después de oficiar la misa", sostuvo a La Nacion una fuente policial. Según una versión, los ladrones habrían llegado a la casa parroquial por un pasillo que nace en la entrada principal y después forzaron una ventana metálica. Pero una fuente parroquial negó esa versión y aseguró a este diario que los delincuentes aprovecharon el horario de misa y directamente entraron en la casa del sacerdote por la puerta de la calle Arcos. La Nacion intentó comunicarse con el sacerdote, pero en la secretaría parroquial explicaron que estaba muy ocupado. Otros hechos El robo en la parroquia San Martín de Porres es el quinto hecho delictivo ocurrido en un templo católico desde mayo pasado, cuando asaltantes sorprendieron a un cura de la Basílica de Santa Rosa de Lima, en Balvanera, donde obligaron a la víctima a recorrer la iglesia para maniatarla luego en su habitación, donde robaron computadoras y plata. A principios de agosto pasado, delincuentes robaron en la iglesia de San Judas Tadeo, de Parque Chacabuco, de donde sustrajeron dinero y objetos de valor cuando un sacerdote oficiaba una misa y otro era distraído por dos personas en el confesionario. Pocos días después, otro ladrón robó pertenencias a fieles de la parroquia de San Vicente de Paul, en el barrio de Mataderos. El cuarto hecho sucedió cuando un delincuente armado asaltó la iglesia de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa en Parque Chacabuco, donde el asaltante amenazó con un arma de fuego a empleados de la santería y sustrajo dinero destinado al mantenimiento de ese templo.