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Restaurante prohíbe a atleta alemán regresar tras comerse 100 platos de pescado

Jaroslav Bobrowski, el triatlonista de Alemania que tuvo problemas por comer demasiado. <a href="https://www.facebook.com/photo.php?fbid=1039018582927632&set=a.105814496248050&type=3&theater" rel="nofollow noopener" target="_blank" data-ylk="slk:Foto: Jaroslav Bobrowski/Facebook;elm:context_link;itc:0;sec:content-canvas" class="link ">Foto: Jaroslav Bobrowski/Facebook</a>

Los restaurantes que ofrecen a los clientes comer todo lo que puedan por un mismo precio resultan un atractivo para muchos comensales y también ofrece buenos réditos a los propietarios, pero en un hecho insólito, uno de esos sitios le prohibió la entrada a un atleta alemán, porque en su visita se comió 100 platos de pescado.

El hecho ocurrió en la localidad de Landshut, en Bavaria, Alemania, donde el deportista de triatlón Jaroslav Bobrowski, se dio gusto a sus anchas en el restaurante Running Sushi, quebrando los ingresos habituales que suele recibir ese local.

El competidor de “ironman”, una de las disciplinas más exigentes de triatlón en el mundo, se convirtió en la pesadilla de los dueños del lugar, pues aunque Bobrowski pagó los $15.90 euros (unos $18 dólares) que valía el bufet, le sacó su mayor provecho ante el desconcierto de todos.

“Cuando fui a la caja, quería dar propina, pero el camarero no quiso aceptarla”, dijo Bobrowski al medio The Local, a quien el propietario no paró de seguir con su mirada y al final manifestó que nunca había visto a alguien comer de semejante manera. “Él come para cinco personas. Eso no es normal”, dijo.

El deportista, quien además trabaja como ingeniero de software, explicó que cuando sigue su estricta dieta de no comer nada durante 20 horas, luego “devora” todo lo que ve hasta que quede totalmente lleno.

Una vez el deportista se sació, el dueño del sitio se le acercó y le dijo que no era bienvenido allí para una futura ocasión, pues sus maneras de comer le causaban un problema al bolsillo del sitio.

“De ahora en adelante me prohibieron volver porque estoy comiendo demasiado“, dijo Bobrowski a The Local, explicando que le sorprendió la decisión del lugar, pues suele comer así en otros sitios de sushi ilimitados.

Dinos qué piensas de la actitud del dueño del restaurante hacia el alemán.

Crédito foto: Facebook

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