El recuerdo de Sebastián Abreu de la pelea en el Centenario antes de un Uruguay-Ecuador, la reacción de Daniel Passarella y los guantes para defenderse

Hay historia del deporte que no se olvidan, que marcan. Incluso, algunas pueden torcer el rumbo de las cosas en lugares emblemáticos. Y la noche del 3 de septiembre de 2000 fue una de esas jornadas en las que el Estado Centenario fue el escenario de un escándalo en el marco de un partido de eliminatorias. Es que en el túnel, se pelearon los seleccionados de Uruguay y Ecuador. Situación que provocó que nunca más vuelvan a salir por el mismo espacio dos equipos. Pero lo curioso del caso es que Sebastián Abreu reveló detalles de cómo comenzó todo, qué hizo Daniel Passarella y qué usaron algunos de sus compañeros para defenderse.

La historia cuenta que todo sucedió en medio de la arenga de los dos equipos, en un espacio de 1,5 metro. El Loco Abreu, en una entrevista en el programa Al mediodía se habla así (DirecTV), explicó que el clima fue creciendo, que los gritos de "guerra" eran cada vez más fuertes y desafiantes y que Passarella, que era el DT de Uruguay, alimentaba ese clima. "Eran arengas típicas de la época y teníamos esa herencia de que en el Centenario te tenía que costar un h... ganarnos. Lo que eran gritos se fue transformando en empujones, además Daniel (Passarella) lo que era como futbolista lo trasladó como entrenador y era como que estábamos poseídos por el mensaje de él. Eso derivó a que alguno reaccione y comenzaron las piñas. Como no había espacio era todo cortito. Y bueno, había un compañero que tenía botines en la mano y los usaba para defenderse", explicó Abreu.

En 2013, el diario El Observador de Uruguay recordó aquel episodio y publicó declaraciones de Vinicio Luna, que era el coordinador de selecciones de Ecuador, que contó: "Fueron 30 segundos tremendos. Cuando terminó todo, me fui a ubicar al banco de los suplente y ahí me di cuenta que de mi cabeza caía un hilito finito de sangre producto de los zapatazos de Abreu". Incluso, en el medio charrúa, señalan que una publicación en Ecuador asegura que Luna tuvo que apelar a su conocimientos de artes marciales para poder detener a Abreu que era el más desenfrenado. En la charla con DirecTV, el Loco dijo: "Bueno, yo estaba metido en esa pelea, pero ustedes saben que yo no soy muy fanático de pelear, tuve mis agarradas, pero...".

Por esos incidentes tuvo que intervenir la policía y aquel partido lo ganó Uruguay por 4-0, pero las cosas habían quedado muy resentidas entre los dos seleccionados. Sin embargo, en el cruce posterior, en 2001, cuando Uruguay vistió Quito, no se registraron problemas entre los equipos y el partido con "pacto de no agresión" terminó igualado 1-1.