Reconstrucción: cómo fue la tragedia de Blaquier en la que murieron seis vecinos
Los 800 habitantes de Blaquier, un pueblo al noroeste de la provincia Buenos Aires, en el partido de Florentino Ameghino, estaban consternados luego de la muerte de seis vecinos en un pozo de bombeo que pertenece a la planta de efluentes cloacales de la zona.
El hecho se produjo durante la tarde del viernes, cuando Ricardo Bottega, de 60 años, que había sido contratado por el municipio para hacer “tareas de mantenimiento rutinario en el sistema de red cloacal”, ingresó al pozo de bombeo ubicado en un lugar llamado El cigarro y no volvió a salir a la superficie.
Según aseguraron desde la intendencia de Florentino Ameghino, Bottega estaba haciendo tareas habituales de mantenimiento. Ya a la mañana del viernes había estado haciendo el cambio de guía de las bombas, y a la tarde, luego de un receso, volvió para continuar con su trabajo.
De acuerdo a lo que explicó Alejandro Sánchez, secretario de Hacienda del municipio, Ezequiel Rodríguez, el encargado de la planta fue quien encontró a Bottega caído en el pozo y descompensado. Ante ese panorama, llamó a los bomberos para socorrerlo. Se acercó al lugar uno de los integrantes de ese cuerpo, Nicolás Sánchez.
Dónde queda Blaquier
Blaquier es un pueblo de 800 habitantes, que queda en el partido de Florentino Ameghino, en el noroeste de la provincia de Buenos Aires. Está muy cerca del límite con Córdoba, y a unos 450 km de Capital Federal.
Como se trata de un pueblo muy chico, en el que se conocen todos, como indicaron los vecinos y funcionarios consultados por LA NACIÓN, y la planta está en uno de los accesos, otras personas se acercaron también al lugar para ayudar. Entre ellos estaba Juan Ramón Sánchez, padre de Nicolás; Mateo Pellegrino, Carlos Renger y Alejandro Centeno. Todos ellos fallecieron en el pozo, mientras intentaban tareas de rescate.
Sin embargo, nadie en el municipio puede asegurar el orden en el que se produjeron las muertes de los cinco. Por un lado, afirmaron que, según relataron los presentes, de a uno fueron descendiendo al pozo para ayudar a los que antes habían bajado y se habían descompensado. Con la de Bottega, en total fueron seis las muertes.
De acuerdo al reporte municipal que se difundió al mediodía del sábado, los bomberos locales “llegaron con prontitud” al lugar y pudieron sacar los cuerpos de las víctimas para brindarles la asistencia médica que requerían. La investigación quedó en manos de la Ayudantía Fiscal de Ameghino, que dispuso el traslado de los cuerpos a Junín para la realización de la autopsia. Luego, fueron entregados a las familias.
“Los agentes del sistema de salud actuaron con velocidad, responsabilidad y sensibilidad frente a la tragedia. Se movilizaron para la atención: ambulancias, personal de enfermería, médicos, administrativos, psicólogos, trabajadores sociales, quienes asistieron a víctimas y acompañaron a las familias”.
En ese reporte, el municipio difundió la causa de los fallecimientos, luego de que se le realizaron las autopsias a los cuerpos. Según el parte oficial, las víctimas murieron por “asfixia mecánica por broncoaspiración”.
En diálogo con LA NACIÓN, el intendente de Florentino Ameghino, Nahuel Mittelbach, explicó: “Lo que podemos confirmar por ahora, es que en el informe de las autopsias surge que la causa del fallecimiento de las víctimas es por asfixia por broncoaspiración”.
Y completó: “Tiene que ver con la inhalación de gases, pero los detalles, forman parte del trabajo pericial que está realizando la Justicia. Al tratarse de un lugar en donde se produce la descomposición de materia orgánica, se generan gases que podrían ser letales”. Tal como manifestó, espera que los peritajes precisen los detalles para esclarecer el hecho que enluta a la comunidad.
Gases
Según Francisco Dadic, médico toxicólogo y director de Toxicología de la Fundación Iberoamericana de Salud Pública, una asfixia mecánica por broncoaspiración se da cuando algo obstruye el pasaje de aire en la vía aérea. Puede producirse por algún elemento, partículas de polvo o también por la acción de algún gas tóxico. “Si la concentración es muy alta, la muerte puede ser más rápida. Los médicos siempre hablamos de concentración-tiempo: cuánto tiempo estuvo la persona en ese ambiente y en qué concentración”, sostuvo el especialista.
Y completó: “Un gas venenoso genera desplazamientos: ocupa el espacio que debería ocupar el oxígeno y lo desplaza. Provoca un colapso respiratorio, eso lleva a una insuficiencia respiratoria, a un paro respiratorio, que sigue en un paro cardiorrespiratorio y a la muerte. Gases como el butano, el propano y el metano provocan eso. En lugares en donde están presentes, las personas tienen dificultad para respirar”.
En otro tramo, Dadic explicó: “Por las características del lugar, que era una planta cloacal, no tenemos que dejar de pensar en gases venenosos de rápida acción y alta mortalidad. El ácido sulfhídrico podría ser uno de ellos. Ha provocado en muchas oportunidades muertes de este tipo por inhalaciones donde hay grandes concentraciones, sobre todo, en rescatistas y personas que asisten a ese tipo de lugares”.
El especialista indicó que en esos lugares también suele haber una gran variedad de gases que provocan fenómenos irritativos en toda la vida aérea superior: “Es muy importante que haya una adecuada prevención y concientización y que se utilicen todos los elementos de protección necesarios cuando se manipulan de tipo de sustancias que pueden llegar a ser muy peligrosas para la persona”.
Duelo
Mittelbach dispuso tres días de duelo en todo el partido, “con la indicación de izar la bandera a media asta en todos los establecimientos públicos”. Y agregó: “Todo el pueblo de Florentino Ameghino está inmerso en un profundo desconsuelo, por esta irremediable perdida”.
Y remarcó que todos los habitantes del partido están en conmoción. “Nuestra comunidad atraviesa una de las tragedias más grandes de su historia. La localidad de Blaquier tiene 800 habitantes y hoy perdió a cinco vecinos”, dijo Mittelbach, luego de asistir al velatorio de los ciudadanos. Hay que aclarar que Bottega era oriundo no de Blaquier, sino de Florentino Ameghino.
“Hoy se vivió mucho dolor y angustia. No hay palabras para explicar lo qué ha pasado. Toda la comunidad atraviesa un profundo sufrimiento”.
Respecto de Bottega, el intendente afirmó que su pérdida se siente en toda la comunidad de Florentino Ameghino, en el distrito y en toda la zona. “Era una persona que se ha dedicado a la música toda su vida; muy conocido y querido por todos”, manifestó.