La reconstrucción de ciudades ucranianas tras la guerra se planea también en español

Ginebra, 6 jun (EFE).- La guerra en Ucrania continúa, pero la ONU y algunas ciudades ucranianas ya piensan en el futuro posbélico, caso de Járkov y Mikolaiv, dos de las más destruidas por los bombardeos rusos y en cuyos planes de reconstrucción participan arquitectos de España y Venezuela.

Los españoles Alberto Cendoya y Diego López Urruchi coordinan desde la Fundación Norman Foster, con sede en Madrid, los planes de reconstrucción de Járkov, la segunda mayor ciudad de Ucrania, y de forma similar la venezolana Ana Páez gestiona el macroproyecto que la firma italiana One Works desarrolla para Mikolaiv.

Ambas ciudades han sufrido una enorme destrucción durante el conflicto: en Járkov más de la mitad de las viviendas resultaron dañadas, mientras que en el histórico centro astillero soviético de Mikolaiv, gran puerto ucraniano del que hoy no pueden salir los barcos, se calcula que el nivel de destrucción es del 45 %.

Ya en abril del año pasado, cuando la guerra apenas cumplía dos meses, sus gobiernos locales acudieron a un foro de alcaldes organizado por la Comisión Económica de las Naciones Unidas para Ucrania (UNECE), donde contactaron con arquitectos como el propio Foster y comenzaron a pensar en sus futuras reconstrucciones.

"Participamos en dos proyectos piloto apoyados por la ONU que en el futuro podrían ser usados por otras ciudades con grandes niveles de destrucción", explica a EFE el alcalde de Mikolaiv, Oleksandr Sienkevich.

PENSAR EN LA RECONSTRUCCIÓN AUNQUE SIGA LA DESTRUCCIÓN

"La reconstrucción debe empezar ahora: Foster nos convenció de ello cuando nos puso el ejemplo de Londres, ciudad que empezó su plan maestro en 1943, con la Segunda Guerra Mundial no terminada", agrega la directora de cooperación internacional del ayuntamiento de Járkov, Olga Demianenko.

Los planes para las dos ciudades son analizados por arquitectos y líderes de los dos gobiernos locales en distintas rondas de contactos en Ginebra patrocinadas por UNECE, la más reciente de ellas esta semana.

Las obras tras la guerra serán costosas: la UNECE calcula que sólo en zonas residenciales los daños de los ataques rusos en Ucrania han causado pérdidas de 46.000 millones de euros, mientras que Járkov calcula que su plan urbano tras la guerra necesitará una financiación de 9.000 millones de euros.

Estos planes de reconstrucción se llevan a cabo también con la participación de los habitantes de las dos urbes, y coinciden en no sólo recuperar lo destruido por los bombardeos, sino también en crear un Mikolaiv y un Járkov mejores que los que había incluso antes de la guerra.

CIUDADES A ESPALDAS DE SUS RÍOS

Por ejemplo, mejorando el transporte, o abriendo al público las orillas de sus grandes ríos, que desde los tiempos de la URSS se consagraron a la industria y dieron la espalda al resto de la ciudad.

"Hemos identificado en Mikolaiv las carencias que tenían como ciudad, sus problemas, y ahí entran las mejores prácticas internacionales", comenta a EFE Páez, formada en la Universidad Central de Venezuela y en el Politécnico de Milán, ciudad donde tiene su sede la firma One Works para la que trabaja.

Mikolaiv "nació al servicio de lo militar, no estaba pensada para la población", señaló, mientras que el plan urbanístico futuro busca que esa ciudad "sea a medida de las personas, pues sus habitantes quieren un lugar donde puedan pasear, ir en bicicleta y llegar con ella fácilmente a los parques".

Esperanzas similares se abrigan en Járkov, con la particularidad de que su proximidad a la frontera rusa, a apenas 30 kilómetros, exigen pensar en una ciudad dotada de seguridad ante el actual enemigo, según comenta a EFE Cendoya.

UNA FUTURA CIUDAD SUBTERRÁNEA

"Nos sorprendió que muchos habitantes, al preguntarles, no pedían viviendas con más espacio, con más luz o más ventilación, sino dotadas con búnkeres", recuerda el arquitecto español, quien avanza que el proyecto en el que participa la fundación considera la creación de redes subterráneas con refugios.

Dentro del plan urbanístico apadrinado por UNECE, la fundación del prestigioso arquitecto británico, quien visitó Járkov a finales del pasado año, se implicaría especialmente en la construcción de un futuro Barrio Tecnológico.

Cendoya apuntó que se celebrará una competición internacional para una de las obras que quieren ser icónicas en la reconstrucción, la de rehabilitación del gravemente dañado edificio del Ayuntamiento de Járkov, en la Plaza de la Libertad, bombardeado en la primera semana de la invasión.

"Arquitectos de todo el mundo aportarían propuestas para rehabilitar el edificio, manteniendo la estructura no destruida, pero dándole nueva vida y creando un icono mixto de historia y futuro, similar a lo que se hizo con el Reichtag de Berlín", explicó el español.

Antonio Broto

(c) Agencia EFE