Yahoo Noticias “Realismo mágico” en la España vaciada. Por las tierras de Teruel
En la Europa del siglo veintiuno se incentiva económicamente a quienes estén dispuestos a repoblar villas rurales abandonadas debido a que sus habitantes emigraron a las grandes metrópolis en busca de un futuro mejor. Es el caso de España, Italia o Suiza, donde pueblos medievales aislados conservan un espléndido patrimonio y rincones ideales para una escapada, pero son escasas las oportunidades laborales y sus vecinos no disponen de todas las comodidades de la vida moderna.
Dos lujosos hoteles han obrado el milagro de revitalizar el tejido productivo y atraer el turismo, retozando con las artes del amartelamiento, porque sentirse mimado no amarga a nadie. Han revolucionado una de las zonas más olvidadas del noroeste español en las históricas comarcas de la Matarraña y el Maestrazgo, de la provincia de Teruel, la gran desconocida. Son el Hotel Torre del Marqués (5 estrellas) acreditado por la firma Small Luxury Hotel y el Palacio Matutano Daudén (4 estrellas).
Si la literatura del realismo mágico transformó lo inaudito en frecuente, estos dos edificios de arquitectura tradicional recuperados pueden crear tendencia. Son emblemas de la producción de riqueza con los criterios de las sociedades modernas: restaurar casas con técnicas constructivas antiquísimas (como el tapial, que compacta tierra, paja y agua), usar los materiales nativos sin erosionar la zona, generar calor y frío de forma eficiente y ofrecer experiencias tan exclusivas que el cliente solo encontrará en esa área.
El matrimonio creador del 5 estrellas
Oscar García y Marta Goiri son dos ingenieros que han dado un giro a sus vidas convirtiéndose en empresarios de viajes y hospedajes de lujo. De casualidad se toparon con los fabulosos paisajes y las típicas casas de labradores del primitivo reino de Aragón. En esta verde comarca del Matarraña pusieron manos a la obra para renovar una masía del siglo XVIII que perteneció al marqués de Santa Coloma convirtiéndolo en un lujoso alojamiento de 18 habitaciones emplazado en medio de 200 hectáreas de bosque verde y rodeado del serrano monte de Monroyo.
Instalarse en el Hotel & Spa Torre del Marqués es romper la rutina. Cada huésped tendrá una vivencia única con estímulos tales como la placidez del entorno, el mimo con los pequeños detalles y el silencio, que se transforma en cómplice y regenera las fibras del recién llegado. Magnifica la experiencia pernoctar en una estancia restaurada bajo los cánones de la arquitecta barcelonesa Angels Castelarnáu, especialista en rehabilitar casas en tierra. Este proyecto sostenible estuvo entre los 40 finalistas del prestigioso certamen de arquitectura moderna Terrafibra Award de 2021, que premia obras construidas en tierra cruda combinada con fibras vegetales.
El entusiasta propietario sabe que un cliente valora el halago y pone a su disposición en exclusiva una sesión de spa y masajes con la firma cosmética Natura Bissé. Se podrá tomar un baño turco o disfrutar del jacuzzi. La cata de aceites Premium de la empresa “Diezdedos” es la oportunidad para entrar en contacto con el sabor de olivas de las variedades arróniz, alberquina o corbellá (de esta última solo existen 3,500 árboles en toda España).
El establecimiento dispone de hasta 65 referencias de vinos de la zona, que podrán maridarse con las elaboraciones del chef, donde brillan exquisiteces como la trufa negra, el jamón de Teruel, el lechazo aragonés, o los melocotones y almendras en el restaurante La Atalaya del Tastavins, que toma su nombre del río vecino. Sin embargo, se preparan para lanzar su propio vino a partir de uvas autóctonas (algunas con más de 50 años de vida), de las variedades macabeo y cariñena nacidas en su finca Mass de Llucia. La intención es crear un vino de pago, haciendo honor a su ADN: la exclusividad.
El espacio Dog Room del hotel permite a los alojados disfrutar de la compañía de sus mascotas. Los paseos a caballo será lo próximo.
El 4 estrellas del Maestrazgo
Un Palacio deteriorado del siglo XVIII que vivió siglos de bonanzas cuando la lana de las ovejas era el petróleo de nuestros días, es el otro emblema de la hostelería rescatado del ostracismo por el empresario Oscar García. Se adivina la fortuna de los antiguos propietarios al ver el magnífico arco ojival que precede la entrada, y la escalera imperial llamada “la del ruedo”, que sorprende al huésped cuando accede a su interior. El edificio perteneció en sus inicios a los Daudén y terminó en manos de los Matutano Daudén a través de casamientos. Ambas dinastías estuvieron enfrentadas durante centurias, y una de las pruebas de su eterno conflicto fue la erección de la iglesia del pueblo frente a la puerta principal del palacio, que obligó a los Daudén a abrir una salida lateral, dejando clausurada hasta el día de hoy, la ostentosa puerta original.
Entre Teruel y la provincia de Castellón se extienden las tierras donde los templarios dejaron leyendas y su impronta histórica, por lo que el nombre de la comarca alude al “maestre” de aquellas órdenes castrenses. Ese halo de añoranza propio de las gestas caballerescas impregna a todos los pueblos medievales del Maestrazgo de un ambiente idílico, que invita al silencio y al sosiego en Mirambel, Cantavieja o la Iglesuela del Cid, este último, enclave del Hotel Palacio que reabrió sus puertas exhibiendo lujo contemporáneo en el verano del pasado año.
El hospedaje palaciego cuenta con 35 habitaciones y una suite de ensueño que pueden ocupar las familias, y en tiempos del señor Matutano solía acomodar al sacerdote del pueblo. En la planta alta el huésped puede usar un flamante gimnasio que enlaza a una zona de spa para relajar mente y cuerpo. Y si el visitante ha pasado el día viendo los edificios históricos de la Iglesuela del Cid, o ha hecho la ruta de la Piedra Seca por el pueblecito de menos de 500 habitantes, podrá recargar energías en el restaurante Torre de los Nublos, donde degustará productos regionales de excelente calidad y frescura. Si lo visita en otoño, estará de suerte, porque las trufas y setas son el manjar más codiciado de estas tierras.
El entorno
Se dice en España que Teruel no existe, y esta broma popular ha dejado de tener sentido poco a poco, pues la región ha aumentado su popularidad. Su clima gélido e inclemente propició refranes como este: “Hasta el cuarenta de mayo no te quites el sayo, y en Teruel hasta el 46”, porque es uno de los meses más lluviosos en la península y se alarga en tierras turolenses. Su reciente notoriedad ha descubierto esas villas entumecidas con tesoros arquitectónicos, históricos y gastronómicos, que pocos visitaban por desconocimiento.
Por ejemplo, Valderrobres, capital administrativa de la comarca de la Matarraña, está en la lista de los pueblos más bonitos de España. Mirambel, en el alto Maestrazgo, presume del “Portal de las Monjas” del siglo XVI, arrimado al convento de clausura de las Agustinas, y de la Casa de los Julianes, donde el laureado director inglés Ken Loach rodó parte del largometraje “Tierra y Libertad”. A la venta en este pueblo, está uno de los palacios del linaje de los Aliaga, la misma familia propietaria de otro palacete en la Iglesuela del Cid y el único visitable, porque ha pasado a titularidad municipal tras la venta por su propietaria.
En esta última villa, donde se encuentra el Hotel Matutano Daudén, se encuentra uno de los sitios más exóticos que se pueden descubrir en estos parajes; segrega un misterio que da qué pensar. La Ermita del Cid, levantada en 1546 sobre restos ibero romanos y una primitiva capilla, cuenta con paredes de pinturas dieciochescas originales y colores brillantes, de higos, calabazas y hojas de vides, en lugar de las imágenes sagradas habituales de las iglesias católicas. Se dice que al igual que la Catedral francesa de Chartres, en este lugar existen poderosas corrientes de energía que han hecho vibrar a las personas más sensibles.
Referencias gastronómicas:
Restaurante Baudilio por Fabiana Arévalo - en Av. Hispanidad, 43, 44580 Valderrobres, Teruel
La Atalaya del Tastavins - Torre del Marqués Hotel & Spa - Small Luxury Hotels Carretera Fuentespalda a Ráfales, Km 2, Paraje Torre del Marques de, 44652, Teruel Reservas: tel: +34978910505
La Torre de los Nublos - Calle Ondevilla, 4, Iglesuela del Cid, Teruel Reservas: +34964880401
