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La reacción de Helena Condis en la COPE es un reflejo del hartazgo con Sergio Busquets

Helena Condis es un reflejo del hartazgo culé con los fallos de Sergio Busquets. (Fuentes: Twitter/@HelenaCondis y REUTERS/Valentyn Ogirenko)
Helena Condis es un reflejo del hartazgo culé con los fallos de Sergio Busquets. (Fuentes: Twitter/@HelenaCondis y REUTERS/Valentyn Ogirenko)

El barcelonismo tiene el tanque de la paciencia por Sergio Busquets en la reserva, precisamente en un año en el que los culés están siendo más tolerantes que nunca. Pero sí aún cuesta asimilar un Barça plagado de jóvenes a los que les falta rodaje, como el único clavo ardiendo al que agarrarse, más cuesta que los veteranos sean los que cometan fallos de juveniles, y el capitán azulgrana ya lleva unos cuantos.

Si bien los mejor años de Busquets ya forman parte del pasado, un jugador absolutamente exprimido desde su irrupción con Pep Guardiola en el banquillo, la pasada Eurocopa jugó un papel destacado con España. De hecho, en la Roja su rendimiento es tremendamente superior y eso en Can Barça no gusta demasiado. Los más optimistas se lo achacaban a Ronald Koeman, pero el pivote lleva al menos tres años lejos de su mejor nivel.

En Vallecas, un error suyo costó tres puntos, hecho hasta admitido por él mismo al final del partido, confesando: "El gol es un error mío. Me dormí y me robaron la cartera".

El runrún alrededor del nivel de uno de los pesos pesados del vestuario no escapa de las retransmisiones. En 'Tiempo de Juego', tras una pérdida en el centro del campo que no acabó en gol del Dynamo de Kiev de milagro, la reacción pasional de Helena Condis fue el reflejo del barcelonismo: "¡Viene de otra pérdida imperdonable de Sergio Busquets!".

La periodista no es muy asidua a destacar el fallo, pero lo de Busquets ya empieza a ser desesperante al haber adoptado cierta periodicidad. De la serenidad a la falta de intensidad hay una línea muy fina.

Dani Senabre secundó a su compañera: "Sí, sí, otra pérdida grotesca de Busquets".

Cada vez es más complicado para el aficionado culé contener la frustración con la leyenda viva del barcelonismo.

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