Ramaphosa abre entre abucheos la 55 Conferencia Nacional de su partido

Johannesburgo, 16 dic (EFE).- El presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, hizo este viernes un llamamiento a la unidad de su partido, el Congreso Nacional Africano (CNA), mientras cantos y gritos de sus detractores interrumpían su discurso de apertura de la 55 Conferencia Nacional de la formación.

"Nuestra desunión continúa a expensas del apoyo del pueblo de Sudáfrica", lamentó el mandatario al inaugurar el encuentro que empezó este viernes, con unas siete horas de retraso, y congregará a más de 4.000 delegados del CNA hasta el próximo martes en el Centro de Exposiciones de Nasrec en Johannesburgo.

Ramaphosa opta a la reelección como líder del partido pese a un escándalo sobre presunta corrupción que en las últimas semanas puso en peligro su futuro político.

El líder de la formación, fundada en 1912, es habitualmente el candidato presidencial en este país, que tiene previsto celebrar elecciones generales en 2024.

Ramaphosa tendrá, como mínimo, un rival para el puesto, el exministro de Sanidad Zweli Mkhize, si bien este tan sólo obtuvo el pasado mes 916 votos de oficinas del CNA frente a los 2.037 recogidos por el presidente, de 70 años.

Entre cantos y gritos de los miembros del partido que se oponen a su liderazgo, Ramaphosa pidió este viernes varias veces sin éxito un silencio que no se produjo hasta que el equipo de seguridad se desplegó frente al escenario.

"La desunión del CNA no surge de diferencias ideológicas, políticas o estratégicas, sino de una disputa por cargos en el Estado y los recursos relacionados con ellos", subrayó el mandatario.

En su discurso, Ramaphosa reivindicó los ideales de libertad que dieron origen al CNA, en el poder desde 1994, cuando se instauró la democracia en la economía más desarrollada de África, pero reconoció que aún queda un largo camino para lograr la "igualdad" de todos los sudafricanos, que aún sufren "altos niveles de pobreza y desempleo".

Asimismo, el presidente atribuyó la grave crisis eléctrica que atraviesa el país, con apagones rotativos, a la mala gestión y la corrupción en la endeudada compañía estatal Eskom.

"Una parte importante del trabajo para revertir los efectos de la 'Captura del Estado' es la recuperación de fondos que se pagaron ilegal o indebidamente a una serie de empresas", dijo el mandatario.

"Hasta la fecha, sólo Eskom ha recuperado casi 3000 millones de rands (cerca de 160 millones de euros) y otros 5.000 millones (más de 266 millones de euros) están siendo reclamados en varios procesos", señaló Ramaphosa.

La "Captura del Estado" es una gran investigación sobre la presunta corrupción que afectó al aparato público sudafricano durante el mandato de su antecesor, Jacob Zumba (2009-2018).

Zuma, que recibió hoy aplausos de militantes a su llegada a la Conferencia Nacional, anunció precisamente a última hora de este jueves una demanda interpuesta ante un tribunal contra Ramaphosa por ser "cómplice" en "delitos cometidos" por el fiscal Billy Downer, quien, según él, filtró ilegalmente sus informes médicos.

Downer es el fiscal principal en otro juicio por corrupción contra Zuma por un acuerdo armamentístico, que se ha aplazado hasta el próximo 30 de enero.

En un comunicado publicado por la Presidencia de Sudáfrica, el jefe del Estado calificó la iniciativa de Zuma de "abuso de los procesos legales" y describió los cargos como "falsos e infundados".

Ramaphosa llega al congreso del partido después de que la Asamblea Nacional (Cámara baja del Parlamento) rechazara este martes un informe que le acusaba de la posible violación de leyes anticorrupción en el escándalo del robo millonario en su granja de Phala Phala (norte) y que podía haber desencadenado un proceso para su destitución.

Exlíder sindical y uno de los sudafricanos negros más ricos, Ramaphosa sucedió a Zuma en 2018, comprometiéndose a atajar la corrupción y el malestar económico desatados durante los nueve años de gobierno de su predecesor.

(c) Agencia EFE