Rafael Amargo no piensa doblegarse ante “la mano negra” y sigue a lo suyo

El coreógrafo Rafael Amargo se ha caído en infinidad de ocasiones pero es conocido por volverse a levantar una vez tras otra. Desde hace un año y varios meses su imagen está en entredicho por la causa judicial abierta en su contra pero él, no se rinde.

La policía les acusó a él y su esposa Lucía Bongianino por un caso de tráfico de drogas pero ella salió absuelta. La pareja feliz se casó en 2019 y son ambos compañeros también a nivel profesional, su unión es fuerte a pesar de la tormenta que ahora recae completamente sobre el bailaor.

A él le piden nueve años de cárcel pero, según contó hace escasos meses en ‘Diez Minutos’ está muy tranquilo de que no va a entrar en chirona porque es inocente: “No tengo miedo porque sé que no he hecho nada malo. Sería una injusticia”.

Sin embargo, como si se tratase de una película de mafiosos, Rafael Amargo también está convencido de que: “he sido cabeza de turco porque saben que yo sé algo, pero yo soy muy leal y llevo callado un año y tres meses. Esto es un sinvivir. Yo estoy convencido de que hay una mano negra contra mí”.

El problema principal de Rafael con todo este embrollo el cual ya ha recurrido legalmente es primero, su mala imagen y segundo la pérdida de ingresos laborales al no poder viajar. Él necesita su pasaporte por su profesión y, de hecho, según reveló al citado medio “perdí 50.000€ con lo de Bollywood” que era una supuesta película que no pudo ir a realizar por el tema judicial pendiente.

Las oportunidades fuera de la frontera española por ahora se han esfumado para el coreógrafo y él dice que es donde más dinero ganaba. En sus declaraciones asegura que “Han llegado a decir: 'A ver si se muere de hambre y se ve obligado a pactar con nosotros’”.

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Así que, a su forma de verlo, no solo hay una mano negra contra su persona sino que su condena pretende ser ejemplarizante y ahora quieren matarlo de hambre y dejarlo sin trabajo para que pacte, que cada uno saque sus conclusiones dado que el caso sigue abierto.

El caso es que, cual Ave Fénix, Rafael no piensa rendirse ante lo que considera una injusticia en toda regla y el bailaor granadino vuelve una vez más al teatro para ganarse el pan y compartir su arte y su talento profesional (que ese es innegable y sigue intacto) sobre las tablas.

La cita es el 4 de agosto y durará tan solo un mes, hasta el 4 de septiembre en el teatro Marquina. La obra no es otra que “The Beautiful Dream of Life” (el hermoso sueño de la vida) de Domingo Zapata. Es una obra autobiográfica que convertirá el teatro en una especie de museo según recoge ‘El Español’.

Es un musical de flamenco urbano en el que Rafael Amargo encarna al personaje de Rodrigo Concepción, un exitoso hombre que vive en su propio mundo pero que, repentinamente, se da una bofetada de realidad y es ahí donde llega la soledad y ese vacío que, quizá en este periodo más que nunca, Rafael Amargo conoce bien de cerca.

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