R House llega a acuerdo con el estado para poner fin a denuncia por espectáculo drag
Un restaurante de Miami llegó a un acuerdo con el estado de la Florida sobre una disputa legal por un espectáculo de drag queens, poniendo fin a un caso de un año que se tiñó de política partidista cuando el gobernador Ron DeSantis acusó al local de intentar sexualizar a los niños.
Los propietarios del restaurante, R House, acordaron pagar una multa de $10,000 para poner fin a la disputa. En un comunicado el martes, los propietarios dijeron que el pago de la multa “no fue resultado de la constatación de infracción de ninguna ley administrativa o penal”.
“Estamos muy contentos que el acuerdo no contenga ninguna admisión o declaración de culpabilidad de R House”, dijeron los propietarios del restaurante en el comunicado. “Además, también nos complace confirmar que la amplia investigación encubierta del estado sobre R House no encontró ningún contenido sexual explícito ilegal en los espectáculos de R House”.
El Departamento de Regulación Empresarial y Profesional de la Florida (FDBPR), que presentó la denuncia contra el restaurante en agosto de 2022, no respondió de inmediato a una solicitud de declaraciones. En su denuncia, los reguladores estatales habían acusado al restaurante de exponer a menores a “espectáculos drag sexualmente explícitos” y de infringir las leyes de decencia de la Florida.
La dependencia estatal, que forma parte de la administración de DeSantis, trató de revocar la licencia de venta de licores del restaurante, una medida que DeSantis dijo que “básicamente” sacaría del negocio a R House.
R House sigue funcionando, aunque sus propietarios dijeron que litigar el caso había sido “arduo y agotador”. El caso contra R House fue también el primero de una serie de denuncias que el estado presentaría posteriormente contra otros dos locales por acoger espectáculos de drag queens.
Esos casos —contra el Hyatt Regency Miami y el histórico teatro Plaza Live de Orlando— están en curso. Pero los registros muestran que en el caso de Orlando, los reguladores estatales presentaron su denuncia a pesar de que no habían encontrado evidencia de actos lascivos en el espectáculo
En el caso de R House, la disputa surgió a raíz de un video publicado en redes sociales en que se veía a una travesti guiando a una niña durante un almuerzo. La artista dijo que los padres le habían pedido que cogiera a la niña de la mano y la acompañara porque era su cumpleaños. La artista aceptó, caminó brevemente con la niña y luego la devolvió a sus padres.
El martes, los propietarios de R House afirmaron que sus espectáculos “nunca estuvieron destinados específicamente a menores”, pero que algunos padres en el pasado “se sintieron especialmente calificados para evaluar qué era entretenimiento apropiado para sus hijos y trajeron a su familia a nuestros espectáculos”.
“Sea como fuere, en enero de 2023, implementamos un límite de edad obligatorio de 18 años y continuaremos así en el futuro”, dijeron. “Somos un pequeño negocio de propiedad independiente y nunca quisimos convertirnos en un pararrayos para cuestiones políticas o culturales divisivas, pero desafortunadamente eso es exactamente lo que sucedió”.
“Estamos muy agradecidos de que este difícil capítulo de nuestras vidas pueda quedar atrás”.