"Quiero estar con Carrie", las últimas palabras de Debbie Reynolds, madre de Carrie Fisher, antes de morir

(WTB/AFP) Debbie Reynolds no ha podido aguantar ni un solo día sin su hija. La actriz de Hollywood, famosa por películas como Cantando bajo la lluvia, ha fallecido tan solo 24 horas después de que Carrie Fisher muriera.

La candidata al Oscar en 1965 por The Unsinkable Molly Brown fue hospitalizada en el centro médico Cedars-Sinai de Los Angeles tras mostrar síntomas de una posible embolia. Al parecer, la intérprete se encontraba en casa de su hija organizando su funeral, cuando se encontró mal. Sus familiares avisaron a los servicios de emergencia, que la trasladaron al prestigioso centro médico, donde pocas horas después murió.

La noticia de la muerte de su hija hizo un gran daño a Reynolds, ya que fue totalmente inesperada. La actriz de La guerra de las galaxias sufrió un infarto el pasado 23 de diciembre en un avión cuando regresaba de Londres a Los Ángeles. A pesar de ser rápidamente hospitalizada y estabilizada en el centro médico UCLA, falleció tres días después.

Tras la trágica noticia, Debby Reynolds publicó un comunicado en el que aseguraba que “Gracias a todos los que habéis disfrutado con los talentos y los dones de mi amada y estupenda hija”.

Todd Fisher, hermana de Carrie, ha revelado que Debby se encontraba en estado de shock tras conocer la muerte de su hija. Según publica TMZ, poco antes de sufrir la embolia la mujer de 84 años le había dicho “Echo mucho de menos a Carrie, quiero estar con ella”.

La relación de Carrie con su madre no fue siempre perfecta. Durante diez años, las dos se dejaron de hablar. La culpa la tuvo la espiral autodestructiva en la que la intérprete de la princesa Leia cayó: drogas, episodios depresivos, trastornos de la alimentación… Pero una vez que Carrie se desintoxicó, su amor mutuo se hizo inquebrantable.

Reynolds -distinguida el año pasado por la Academia con el Premio Humanitario Jean Hersholt- cautivó a las audiencias por primera vez en 1952 con su actuación en ‘Cantando bajo la lluvia‘, que protagonizó con Gene Kelly a pesar de no ser bailarina profesional.

“‘Cantando bajo la lluvia’ y dar a luz fueron las cosas más difíciles que hice en mi vida”, escribió en una primera autobiografía titulada ‘Debbie’ publicada en 1988.

Nacida bajo el nombre de Mary Frances Reynolds el 1 de abril de 1932 en El Paso, Texas, fue la segunda hija de Raymond Francis Reynolds, un carpintero de vías ferroviarias, y de su esposa Maxine. Los estudios MGM de Hollywood la descubrieron después de ganar un concurso de belleza a los 16 años en California.

Le tocaron por lo general papeles en los que interpretaba una heroína joven. ‘Two Weeks With Love’ (1950) y ‘Tammy and the Bachelor’ (1957), las primeras de una serie de populares filmes juveniles.

Su papel en ‘La inconquistable Molly Brown’ de 1964 le valió una nominación al Oscar. Fuera de la pantalla, Reynolds estuvo brevemente casada con el padre de Carrie, el cantante Eddie Fisher. El matrimonio de apariencia perfecta acabó cuando el intérprete dejó a la actriz para correr a los brazos de su mejor amiga, el icono Elizabeth Taylor. Con todo, ambas se mantuvieron cercanas hasta la muerte de Taylor en 2011.