Qué es la división del vórtice polar y por qué hará que el resto del invierno en EEUU y Europa sea gélido

Los meteorólogos se enfrentan ahora a un nuevo fenómeno climático que convertirá en un verdadero congelador a varias regiones de Estados Unidos y de Europa lo que resta de la temporada invernal.

Se esperan temperaturas gélidas en los próximos días en el hemisferio norte. (Photo by Matt McClain/The Washington Post via Getty Images)
Se esperan temperaturas gélidas en los próximos días en el hemisferio norte. (Photo by Matt McClain/The Washington Post via Getty Images)

Recientes análisis de modelos computadorizados alertan sobre la división en tres partes del vórtice polar, que no es más que un gran remolino de vientos alrededor de un área de baja presión en la atmósfera superior sobre el Ártico, según explica el portal Axios.

Los que pensaron que este invierno lo iban a pasar relajados, pues deben ir preparándose con todo, porque se esperan brutales olas de frío para los próximos dos meses, tanto en la costa este de EEUU como gran parte de Europa Occidental y Eurasia.

El vórtice polar se asocia con parte del aire más frío durante el invierno y su división, que puede ser temporal, sucede cuando el aire ultrafrío está en movimiento.

¿Por qué se fractura el vórtice polar? Se debe al calentamiento repentino y drástico del aire en la estratosfera, a unos 100,000 pies sobre el Ártico. Al dividirse, envía aire frío hacia el sur.

Todavía no se puede saber con exactitud a dónde irá a parar el aire más frío y cómo esta división podrá afectar los patrones climáticos del planeta. Tener esos detalles será el trabajo primordial de los meteorólogos para alertar a las distintas poblaciones sobre el crudo invierno que se avecina.

Sin embargo, la mayoría de los modelos informáticos concuerdan en el mismo escenario general para las distintas regiones que se verán afectadas por la masa de aire que ya comenzó a moverse hacia esas zonas, aunque las condiciones más frías serán más probables en Europa Occidental y gran parte de Eurasia durante el resto de febrero y hasta principios de marzo, de acuerdo con los expertos.

La actual temporada invernal tuvo un comienzo suave, pero ahora 48 estados de EEUU podrían experimentar una segunda mitad de temporada bastante fuerte, con temperaturas al aire libre por debajo de los cero grados Fahrenheit. Incluso, a partir de este venidero fin de semana será más frío en el medio oeste del país.

(AP Photo/Manuel Balce Ceneta)
(AP Photo/Manuel Balce Ceneta)

No obstante, de acuerdo con declaraciones de Michael Ventrice, meteorólogo de The Weather Company, al portal Axios, es probable que entre el 28 de enero y el 5 de febrero ocurran los mayores fríos del invierno en las zonas comprendidas entre el medio Oeste hasta el valle de Ohio y la costa Este.

Ventrice predice que para el corredor del este de EEUU “será una larga segunda mitad del invierno”, además de que “también será una cruda ola de frío para Europa”.

Amy Butler, científica investigadora del Instituto Cooperativo para la Investigación en Ciencias Ambientales, explicó también que no es la primera vez que se rompe el vórtice polar. En años anteriores también ha ocurrido debido al calentamiento de la estratosfera.

Este patrón climático en evolución, según Butler, podría traer para lo que resta de enero y todo febrero récords de frío en Eurasia y el este de los Estados Unidos.

También podría generar condiciones más cálidas que el promedio en Groenlandia y Asia subtropical, refiere esta experta, además del desarrollo de un área de bloqueo de alta presión en el norte del Pacífico, así como en Groenlandia.

Esa área ralentizará la progresión de los sistemas meteorológicos, que provocan que las condiciones invernales se mantengan en un mismo lugar durante un período prolongado.

Butler recuerda además que algunas de las tormentas de nieve más grandes de la costa este registradas, y que paralizaron grandes ciudades desde Washington hasta Boston, se produjeron cuando se establecieron patrones climáticos de bloqueo.

La preocupación de muchos está en que si el frío y la nieve resultan significativos podrían impactar también en la economía, ya resentida por los efectos del cierre parcial del gobierno estadounidense.

Pero como guerra avisada no mata soldado, desde ya se pueden ir sacando todo lo que sirva para protegerse del frío y haciendo planes para resistir la cruda temporada invernal que resta.