Casi se pusieron de acuerdo, boxeadores cubanos triunfan en el mismo round y por la vía del dolor
Después de una noche caliente en Hialeah, el boxeo cubano prosiguió su buen andar en Orlando. Dos representantes de la nueva ola antillana lograron victorias en la velada Noche de Campeones que tuvo lugar en el Hotel Caribe Royale, convertido en plaza fuerte del pugilismo en la Florida.
El ligero Idalberto Umara y el súper ligero Yoenis Telléz casi que se pusieron de acuerdo para llevarse victorias por nocaut en el segundo asalto y confirmar cuan valiosos son para sus respectivas empresas y por qué deben ser seguidos por los fanáticos del boxeo más allá de la esfera cubana.
Umara conquistó su novena victoria como profesional y su segunda en la misma plaza turística al imponerse al colombiano David Julio Bassa como parte de la velada de la empresa Boxlab Promotions, que será televisada por CBS Sports Network este domingo (en diferido) a partir de las 10:30 PM.
Campeón mundial juvenil en el 2018, el prospecto resultó muy superior desde el principio y acabó con las acciones con un gancho al hígado que dobló al cafetero, demostrando que poco a poco se acerca a una exposición superior y a retos más complicados.
“Queremos que pelee por un título importante en abril’’, expresó su entrenador Osmiri “Morito’’ Fernández.
“Umara es alguien que ha demostrado lo que puede hacer en el cuadrilátero y en la promotora M&R estamos muy contentos con su progresión. No le tememos a los retos que puedan venir’’.
Tal parece que fue ayer su llegada al boxeo de Miami, pero ya son muchos los que conocen de su talento, guiado de la mano de la empresa M&R Boxing Promotions que lo tiene muy cerca de dar un salto cualitativo que le permita probarse a un nivel superior.
Téllez, por su parte, reafirmó su calidad al vencer también por nocaut en el segundo asalto al mexicano Alberto Delgado, un rival sin muchas pretensiones, pero que era el indicado para la presentación del cubano, quien venía de una lesión en la mano.
Sin perder mucho tiempo, Téllez pasó por encima de Delgado y con una fuerte combinación lo envió a la lona sin que pudiera vencer el conteo de 10, lo que trae de vuelta al antillano que es compañero de escuadra de David Morell Jr. en el establo de Ronnie Shields, en Houston.
“Sé que mi oponente no era nada del otro mundo, pero hice lo que tenía que hacer’’, apuntó Téllez.
“Quiero volver, pero primero me aseguraré que todo está bien con mi mano. Después de todo fue bueno subir al ring nuevamente y sentir como me levantaban la mano’’.
Desde Shields a la gente de su promotora, todo el mundo habla maravillas de este santiaguero de 22 años y no por gusto se lo han confiado a alguien como el entrenador que hizo campeón a Erislandy Lara, a los hermanos Jermell y Jermall Charlo, y que ahora conduce los hilos de Morell.
Este fue su tercer triunfo profesional por la vía del cloroformo.