El PSOE denuncia una campaña de acoso y derribo contra Sánchez entre críticas de la oposición

El PSOE denuncia una campaña de acoso y derribo contra Sánchez entre críticas de la oposición

El 41º Congreso Federal del PSOE, que se celebra en Sevilla, ha sido escenario de una gran tensión interna y externa para el partido. El ambiente en el cónclave refleja una profunda división y una sensación de 'tormenta perfecta'.

Mientras algunos miembros de la dirección socialista presentan el evento como una oportunidad de unidad frente a los ataques externos, especialmente de la derecha y la ultraderecha, otros expresan en privado su descontento y malestar por la situación judicial que rodea a algunos de sus miembros.

El Congreso se ha visto marcado por el eco de diversas causas que afectan a miembros del PSOE, como el caso de Juan Lobato, líder del PSOE de Madrid, y las investigaciones que implican al exministro José Luis Ábalos y miembros de su equipo más cercano.

A pesar de las acusaciones, la dirección socialista ha optado por mantener un discurso de resistencia, apelando a la unidad interna y defendiendo lo que consideran un "acoso judicial" orquestado por sus rivales políticos y una campaña de desinformación y bulos.

Desde la tribuna, figuras clave como la vicesecretaria general María Jesús Montero han elevado el tono contra el PP y sus aliados, acusándolos de fomentar una campaña de desinformación y "golpismo" contra el Gobierno de Sánchez.

"Pedro es nuestro líder indiscutible"

Las muestras de apoyo a Pedro Sánchez fueron unánimes, con discursos como el de Diana Morant, quien destacó con contundencia: "Pedro es nuestro líder indiscutible" y agregó que "hay que apoyarle a muerte". Su intervención se sumó a las voces de otros delegados que expresaron su respaldo al presidente.

Santos Cerdán, número tres del PSOE denunció una "cacería humana" y una campaña de mentiras contra Sánchez, tanto en los medios de comunicación como en el ámbito judicial. Subrayó que nunca antes en democracia se había visto un ataque tan feroz contra un presidente legítimo, aludiendo a los esfuerzos de la derecha por generar caos y mantener sus privilegios.

En este contexto, la participación de líderes históricos como José Luis Rodríguez Zapatero y otros ministros refuerzan el mensaje de cohesión, mientras que algunos líderes regionales como Emiliano García-Page y Ximo Puig se muestran críticos ante la situación.

"Ceremonia de la corrupción"

El Partido Popular, por su parte, ha aprovechado el Congreso del PSOE para lanzar acusaciones de "blindaje de la corrupción", señalando las múltiples investigaciones que afectan al entorno de Pedro Sánchez. Cuca Gamarra, secretaria general del PP, ha calificado el cónclave socialista de "ceremonia de la corrupción" y ha criticado la actitud del PSOE frente a los escándalos judiciales.

Así, mientras que el PSOE busca reforzar su liderazgo y mantener la unidad interna, el Congreso se convierte en una batalla de narrativas entre acusaciones de corrupción y "persecución judicial" por parte de la derecha. A pesar de la fachada de cohesión, persisten las tensiones, especialmente con las primarias en Madrid y las sombras que acechan al entorno cercano de Sánchez por las imputaciones de su mujer y su hermano.