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Protesta en el Obelisco y en la quinta de Olivos por la vuelta de la actividad náutica

Corte en ramal Tigre
Fuente: Archivo

Una caravana de cerca de un centenar vehículos, incluidas lanchas y camiones, cortó parcialmente este sábado durante más de tres horas el acceso a Tigre en reclamo de que las autoridades nacionales autoricen la actividad náutica, que involucra guarderías, particulares y guías de pesca que están parados desde hace 8 meses.

Los organizadores anunciaron que el viernes a las 18 se manifestarán en simultáneo el Obelisco y el frente de la Quinta de Olivos para pedir que se reanude la actividad que da trabajo a guarderías náuticas, guías de pesca, a las concesionarias de embarcaciones, mecánicos y además de las innumerables casas que venden artículos del ramo y que viven de esta actividad.

"Estamos acá protestando por la apertura, no molestamos a nadie. No queremos pensar que se trata de una cuestión ideológica, lo único que queremos es salir a trabajar", declaró Sebastián uno guía de pesca inactivo. En la cuarentena se dedicó a la carpintería sobrevivir. Hasta organizó una rifa para colocar sus cañas y reeles y obtener dinero que le permita seguir adelante.

Los vehículos se colocaron en la banquina y tomaron dos carriles del acceso a Tigre y colocaron un camión con una lancha para cortar el paso.

El reclamo está orientado al Gobierno nacional y al bonaerense para que habiliten la navegación.

Manifestación por la apertura de las actividades naúticas
Fuente: Archivo

Los manifestantes convocaron para el viernes próximo a una doble manifestación: por un lado, coparán el Obelisco a las 18 y, a la misma hora, se movilizarán frente a la Quinta de Olivos bajo la consigna "navegar al aire libre y en familia no contagia".

Los que convocan son protagonistas de las actividades relacionadas con el mundo náutico, ya que desde que comenzó la cuarentena está vedada la navegación deportiva y la pesca deportiva desde el agua y navegar en el Río de la Plata y en el Delta.

Esto afecta a las guarderías náuticas y a los guías de pesca, a las concesionarias de embarcaciones, mecánicos y además de las innumerables casas que venden artículos del ramo y que viven de esta actividad.

Solo se permitió desde hace pocas semanas la navegación individual a vela.