Prohibir cabezazos en el fútbol no es suficiente para evitar las conmociones cerebrales

Por Andrew M. Seaman (Reuters Health) - Prohibir cabecear la pelota en los partidos de fútbol podría reducir la cantidad de conmociones cerebrales, aunque un estudio sugiere que sería aún más útil eliminar el contacto físico entre los jugadores. El autor principal dijo a Reuters Health que los hallazgos desafían los llamados recientes a erradicar lo golpes de cabeza al balón. "Suena muy bien", dijo la autora principal, Dawn Comstock, de la Facultad de Salud Pública de University of Colorado, Anschutz, Aurora. Su equipo publicó en JAMA Pediatrics que los jugadores son más propensos a padecer conmociones cerebrales cuando cabecean la pelota que en otras jugadas, pero que esa no es la causa de las lesiones. "Cuando indagamos mejor, no se trata del momento en el que los jugadores golpean la pelota con la cabeza. Se trata del contacto físico con otro jugador cuando van a cabecear", sostuvo Comstock. La campaña Fútbol Seguro, de la organización no gubernamental Sports Legacy Institute, con sede en Boston, recomienda evitar que los jugadores cabeceen la pelota hasta la educación secundaria o los 14 años. Jugadores profesionales respaldan esta iniciativa. Los autores estudiaron a una muestra representativa de jugadores de fútbol en la educación secundaria de Estados Unidos. En el período 2005-2014, hubo 627 traumatismos de cráneo en 1.393.753 de prácticas o partidos de fútbol. El motivo principal de las lesiones fue el contacto entre los jugadores, dijeron los investigadores. Los cabezazos fueron la jugada más asociada con las conmociones cerebrales frente a otras jugadas, como el pase o la defensa de la pelota, con el 31 por ciento de las lesiones en los varones o un cuarto de las lesiones en las mujeres. El 78 de los casos entre hombres y el 62 por ciento entre mujeres ocurrieron por el choque contra otro jugador al cabecear. Si bien algunos jugadores juveniles se lesionan al golpear la pelota con la cabeza, la cifra es muy baja si se la compara con la cantidad que se lesiona por el choque con otro jugador al intentar esa jugada, dijo Comstock. La autora comentó que varias ligas prohíben el contacto físico entre los jugadores. El doctor Robert Cantu, cofundador y director médico de Sports Legacy Institute, dijo a Reuters Health que el estudio reafirma hallazgos previos sobre la frecuencia de los traumatismos de cráneo durante los cabezazos. "Lo que (Comstock) señala, y lo hace sobre el deporte de los colegios secundarios, no las universidades, es que también hay que reducir el juego rudo", comentó Cantu, que no participó del estudio. Subrayó que el máximo desarrollo cerebral ocurre antes de los 14 años. "Prohibir cabecear la pelota antes de los 14 (años), reduciría los traumatismos de cráneo desde un 30 por ciento a 0 por ciento en un día", aseguró Christopher Nowinski, cofundador y director ejecutivo de Sports Legacy Institute. En cambio, el doctor Jeffrey Bazarian, del Centro Médico de University of Rochester, Nueva York, aseguró que sería difícil saber cuántas conmociones cerebrales podrían evitarse si se aplicaran las normas vigentes. FUENTE: JAMA Pediatrics, online 13 de julio del 2015.