Anuncios

El Principito regresa en un viaje espiritual

Antoine de Saint-Exupéry sobrevoló tanto las arenas del Sahara como la estepa patagónica. Por tanto no de extrañar que su Principito vislumbrara desde su asteroide B 612 el sur argentino como destino para una nueva visita al planeta Tierra. Al fin y al cabo, hay quienes dicen que el dibujo del elefante en el vientre de la boa estaba inspirado en la visión aérea de la amesetada Isla de los Pájaros, sobre el istmo de la Península de Valdés. Así es que el poeta y empresario farmacéutico Alejandro Roemmers imaginó un nuevo encuentro del Príncipe, devenido ya en joven adulto, con un viajero, homónimo del autor, que recorre las solitarias rutas patagónicas, ya no en avión, sino en auto. El regreso del joven Príncipe, un relato escrito hace unos años, se convierte ahora en un musical que se estrena hoy por streaming y apunta a un futuro de funciones presenciales.

"Es una historia muy simple, de dos seres en un viaje que experimentan una transformación, de lo que habla la obra es del ser humano", sintetiza Delia Elnecavé, directora de la puesta que se emitirá en vivo desde el escenario del Teatro Broadway. "La obra incluye flashbacks de momentos del Principito, de la obra de Saint-Exupéry, pero el que hace este viaje es el Príncipe, de grande. El encuentro con Alejandro, es como el de dos caras de una misma moneda, son expresiones de la unicidad de la humanidad, como lo son Caín y Abel, una misma persona debatiendo quién es", explica Elnecavé, en entrevista por Zoom compartida con los dos protagonistas, José "El Purre" Giménez Zapiola y Patricio Arellano, Príncipe y Alejandro, respectivamente.

"Creo que la esencia de la niñez sigue en él", dice "El Purre" sobre su personaje, "su llegada a la Tierra y el encuentro con Alejandro es el que lo va a hacer madurar y evolucionar."

Los cambios en uno tienen un contrapunto en la transformación en el otro: "Encaramos mi personaje, Alejandro, desde lo concreto de su vivir apesadumbrado, con duelos no resueltos. Al principio pareciera que es Alejandro el que va a enseñar cosas de este planeta al Príncipe. Pero al final es este el que termina ablandando el corazón de Alejandro y recordándole algunas cosas que él ya sabe: que somos ambos maestros el uno del otro", complementa la visión de los personajes Arellano, en una pausa entre los últimos ensayos para la reposición de Un estreno o un velatorio, la obra de Flavio Mendoza que se prepara para reestrenar apenas se habiliten los espectáculos presenciales, en el que forma parte también del elenco.

"Mi personaje, en una especie de reflexión final cuenta que conocerlo al Príncipe fue transformador", agrega "Pato" Arellano. "Y honestamente, con una mano en el corazón, puedo decir que a mí también me transformó en cierto punto, esta es una obra que me atravesó." Pocas horas después de la entrevista renunció Arellano a su participación en Cantando por un sueño. Tal vez un salto similar al de su personaje, de cierta situación vivida con pesar a otra que describe como "placentera" para su carrera actoral.

El musical El regreso del joven Príncipe tiene un recorrido previo al del estreno de esta noche. Surgió como una iniciativa de un grupo parroquial de Hurlingham, la Compañía Artectura, que sobre una idea original del padre Rodrigo Durini lo puso en escena para los eventos de la Pascua Joven, en una versión escénica que llegó a presentarse en una función en el Teatro Broadway a fines del año pasado. A partir de esta experiencia, en la que Dalia Elnecavé colaboró en su última fase como coach actoral, surgió la propuesta de dar el salto a una puesta con un elenco profesional.

¿Qué quedó de la propuesta original? Dos actores del primer elenco, la producción a cargo de Artectura, la continuidad en el Broadway y una idea escénica fuertemente reelaborada por Elnecavé. "Tengo fama de manos de tijera, he pecado, metí mano para darle una línea de dramaturgia más activa", confiesa. ¿Es una obra religiosa? Elnecavé no se reconoce en ninguna religión específica, pero consigna de alguna manera la presencia de Dios en su labor escénica. "Es complejo el tema de hablar de Dios, que para cada cual es una cosa tan diferente, podría decir que para mí es el tiempo".

"Creo que de alguna manera está implícito en el texto -acota Arellano-, sin nombrarlo jamás a Dios, está en que exista tanta magia en los encuentros, y no sólo en la historia del Príncipe. En la vida misma nos pasa que a veces hay personas que aparecen y nos transforman. El Príncipe dice en un pasaje de la obra que a veces aparecen personas que son como estrellas, que nos iluminan y que nos siguen iluminando incluso después de haberse ido de este mundo. Creo que eso nos debe haber pasado a todos, de encontrarnos con el milagro de la vida, el nacimiento y la muerte, que tiene mala fama pero que es una realidad, a la que todos decidimos no mirar, no ver".

La obra está planteada para un público familiar. No es un espectáculo para chicos, pero permitiría, al decir de "El Purre", un aprendizaje "tanto para un adulto como para un niño". Y el actor que creció desde su participación como niño en la serie O11CE, de Disney, hasta su reciente protagónico en Go! Agrega: "Elegí ser parte de la obra porque es una enseñanza para mí hacerlo. La historia está contada de una manera en que nos recuerda un montón de cosas que ya sabíamos y que quedaban olvidadas."

¿De qué manera se puede contar una historia de un encuentro de tono poético, espiritual, sobre un escenario, y emitirlo por pantallas, sin que se pierda su esencia y a la vez atrape la atención del espectador? "Siempre la obra escrita a la dicha, representada, hay una transformación", dice Elnecavé. Tuvo que pasar, según admite, por un acelerado aprendizaje de las posibilidades del streaming, indagando en las experiencias ya acumuladas en otras latitudes y buscando el asesoramiento de expertos en filmación. La dirección musical fue confiada a Daniel Vila.

El trabajo con cuatro cámaras implicó cambios en cómo plantarse sobre el escenario, también para los actores, con diálogos más cercanos a los formatos de pantalla al disponer de la mirada de cámaras desde ángulos diversos. Elnecavé encontró sin embargo en la nueva modalidad una continuidad conceptual en su estilo: "Soy clásica en lo teatral, pero me gusta pensar las cosas cinematográficamente, el cine es para mí muy inspirador para poder contar teatro".

Para agendar

Las funciones por streaming de El regreso del joven Príncipe están programadas para hoy, y el viernes 6 y los sábados 14 y 21 de noviembre, siempre a las 21, con venta de entradas por PassLine.