Sin presupuesto asignado, hoy inicia el proceso formal de transición AMLO-Sheinbaum

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El cambio de gobierno entre el presidente Andrés Manuel López Obrador y Claudia Sheinbaum será sin presupuesto etiquetado para el fondo de transición y con un proceso de entrega-recepción de menor duración que en otros sexenios, ya que la próxima administración iniciará el 1 de octubre y no el 1 de diciembre, como solía ocurrir.

Hoy 15 de agosto de 2024, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) entregará a Sheinbaum la constancia de mayoría como presidenta electa en una sesión solemne. De acuerdo con el Glosario Electoral, se trata de un documento que da la autoridad electoral competente a quien obtuvo la mayor cantidad de votos válidos en las elecciones, una vez que las impugnaciones fueron resueltas. 

Para esto, el 14 de agosto la Sala Superior del TEPJF analizó y aprobó el dictamen de cómputo final, declaración de validez y de presidenta electa. Una vez con la constancia de mayoría entregada, el 30 de septiembre concluirá el gobierno de López Obrador y el 1 de octubre iniciará el de Sheinbaum. 

A continuación te explicamos los puntos clave de la transición, qué sucedió con el presupuesto y cuáles son las fechas más importantes: 

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¿Qué implica la entrega-recepción? 

En junio de 2023, el presidente emitió un acuerdo donde se establecen las normas y acciones para la entrega-recepción al término de la administración gubernamental, y la Secretaría de la Función Pública (SFP) será la encargada de coordinar y dar seguimiento a dicho procedimiento. 

Según el acuerdo, el informe de gestión gubernamental, el acta de entrega-recepción institucional de los recursos presupuestarios, financieros, humanos y materiales que les hayan sido asignados y la memoria documental de las acciones relevantes de programas, proyectos de gobierno, políticas públicas u otras acciones gubernamentales forman parte del procedimiento de rendición de cuentas. 

En el primero, se deben reportar las acciones realizadas de la fecha de inicio del cargo de la persona titular del Poder Ejecutivo Federal, a la fecha de conclusión. Por ejemplo, resultados, logros alcanzados, recursos financieros, humanos y materiales y hasta observaciones de auditorías.

El informe de gestión gubernamental debe entregarse a más tardar el 30 de agosto del último año de gobierno, e incluir información actualizada con cifras reales al 30 de junio y con cifras estimadas del 1 de julio al 30 de septiembre del mismo año.

“La persona servidora pública saliente podrá ser requerida por la persona entrante para que realice las aclaraciones o proporcione información adicional que le solicite”, se lee en el acuerdo. 

La abogada Jesika Torres explica en entrevista que cuando Claudia Sheinbaum obtenga su constancia de mayoría obtiene atribuciones por su cargo de presidenta electa.

“Tiene atribuciones para poder promulgar leyes, para hacer nombramientos o remociones, para preservar la seguridad nacional, para temas de política exterior. Se puede dar el espacio para dar continuidad a la agenda pública del presidente en funciones, lo que se busca es que se pueda familiarizar con todas las operaciones de gobierno, coordinar al gobierno saliente con el entrante”, dice al respecto.  

¿Hay presupuesto para la transición?

Aunque por ley sí se contempla un presupuesto para el periodo de transición, el presidente Andrés Manuel López Obrador no lo consideró para Claudia Sheinbaum.  

“No hay problema, es que el gobierno tiene ahorros. Como ya no permitimos la corrupción y hay un gobierno austero, siempre hay ahorros”, contestó López Obrador al ser cuestionado en la conferencia de prensa del 7 de julio de 2024 si tenía una partida establecida para la transición. 

Sin embargo, Adriana García, coordinadora de Análisis Económico de la organización México, ¿cómo vamos?, señala que no hay ahorros y sí existen niveles récord de deuda pública. 

“En este sexenio se terminaron los fideicomisos, que eran los ahorros que se tenían de otros gobiernos, y no se impulsó una reforma fiscal que aumentara los ingresos tributarios. Por otra parte, observamos niveles récord de deuda pública, entonces el hecho de decir que como ya no hay corrupción, hay ahorros, parece no ser válido en un contexto donde tenemos importantes montos de deuda”.

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El artículo 43 de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria establece que se podrán aprobar recursos en el presupuesto para crear un fondo específico en apoyo a la o el presidente electo. 

“En el año en que termina su encargo, el Ejecutivo Federal deberá elaborar anteproyectos de iniciativa de Ley de Ingresos y del proyecto de Presupuesto de Egresos en apoyo al Presidente Electo, incluyendo sus recomendaciones”, se lee en dicho artículo.

El recurso aprobado en ese fondo también sirve para elaborar el Plan Nacional de Desarrollo, es decir, el documento en el que el Gobierno de México explica cuáles son los objetivos prioritarios durante el sexenio.

“Para realizar las actividades a que se refiere este artículo y la elaboración del Plan Nacional de Desarrollo, se podrán aprobar recursos en el correspondiente Presupuesto de Egresos para cubrir los gastos de un equipo de asesores que apoye los trabajos del Presidente Electo, estableciendo para tal efecto un Fondo específico que estará sujeto a las normas de ejercicio y fiscalización de los recursos federales que correspondan”, continúa el artículo 43. 

Además, el artículo 63 del Reglamento de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria detalla que los recursos de este fondo se destinarán para los trabajos y actividades del presidente electo y su equipo de asesores y la presentación de proyectos de la Ley de Ingresos y Presupuesto de Egresos; programas gubernamentales; trabajos de enlace con la administración saliente; y actividades que permitan crear las condiciones para el inicio de su cargo.

En el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF), dentro del Ramo 23, Provisiones salariales y Económicas, Enrique Peña Nieto destinó 150 millones de pesos a Andrés Manuel López Obrador. 

“Todavía no decidimos sobre el uso de esos recursos. Vamos a evaluar la conveniencia de utilizar esos fondos”, declaró López Obrador como presidente electo, según Expansión.

Sin embargo, una auditoría de cumplimiento a la totalidad del fondo de transición da cuenta de que los recursos sí fueron utilizados, hasta el 31 de diciembre de 2018 que estuvieron vigentes. En su mayoría, el dinero aportado desde julio de 2018 fue usado para el pago de honorarios. 

“El fideicomiso reportó egresos por 154,646.9 miles de pesos, conformados por 135,214.4 miles de pesos de pagos de honorarios asimilables a salarios; 13,486.0 miles de pesos reintegrados a la Tesorería de la Federación (TESOFE); 4,646.9 miles de pesos enterados con carácter de “Aprovechamientos” a la TESOFE, provenientes de los rendimientos que se generaron en las cuentas bancarias del Fideicomiso; 600.0 miles de pesos de honorarios fiduciarios; 179.3 miles de pesos de impuestos y derechos; 486.2 miles de pesos de comisiones bancarias, y 34.1 miles de pesos de honorarios profesionales”, se lee en la auditoría.

Transición AMLO-Sheinbaum: sin presupuesto asignado pese a gastos de personal y para elaborar plan de gobierno
Captura de pantalla ASF.

 

Para este cambio de gobierno, en el presupuesto federal de 2024 el Ramo 23 no incluye el fondo de transición. 

“No vamos a usar presupuesto de transición, de hecho, ya estamos trabajando los compañeros, compañeras que hemos nombrado con sus pares del Gobierno de México. Entonces no vamos a usar presupuesto de transición y vamos a seguir trabajando como hasta ahora”, declaró Sheinbaum al ser cuestionada en la conferencia de prensa del 6 de agosto.

La abogada Jesika Alejandra Torres Velázquez señala que si bien no está etiquetado un fondo específico para la transición gubernamental, este proceso sí implicará presupuesto y debería transparentarse el gasto. 

“Puede variar de un sexenio a otro, puede estar sujeto a cuestiones presupuestarias, no obstante, siempre tienen que rendir cuentas, actuar con transparencia porque si hacen una auditoría o control deben demostrar ese gasto de la transición presidencial. Se tiene que analizar de qué fondo y cómo fueron utilizados estos recursos”, sostiene.

Designación de Juan Ramón de la Fuente y reuniones con AMLO

El 4 de junio Claudia Sheinbaum anunció en X a Juan Ramón de la Fuente, ex-rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), como encargado de coordinar los trabajos de transición de gobierno.

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Juan Ramón de la Fuente, exrector de la UNAM, coordinará los trabajos de tansición de gobierno; nombrado por Claudia Sheinbaum. Foto: especial

 

Luego el primer encuentro oficial luego de las elecciones entre el presidente López Obrador y Sheinbaum ocurrió el 10 de junio de 2024. Fue una comida privada en Palacio Nacional. 

“Vamos a tratar el tema de la transición, de la entrega-recepción, ponernos de acuerdo. La voy a invitar para ir juntos, no se va a poder a todo el país, pero a algunas regiones”, adelantó el presidente en la conferencia matutina de ese día.   

Desde el 14 de junio de 2024, López Obrador y Sheinbaum realizan una gira con eventos públicos y privados por todo el país que concluirá en agosto, según adelantó el presidente en la conferencia matutina del 23 de julio de 2024. 

En contraste, López Obrador y Enrique Peña Nieto se reunieron públicamente en Palacio Nacional sólo en tres ocasiones para la transición gubernamental: el 2 de julio de 2018, dos días después de las elecciones; el 9 de agosto de 2018, un día después de la entrega de constancia de mayoría por parte del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), que acreditó el triunfo del entonces candidato de “Juntos Haremos Historia”; y el 20 de agosto de de 2018, junto con los gabinetes entrante y saliente. 

La transición gubernamental concluye cuando inicia el nuevo gobierno, es decir, el 1 de octubre de 2024, cuando Sheinbaum sea ya presidenta. 

“El Presidente entrará a ejercer su encargo el 1o. de octubre y durará en él seis años”, establece el artículo 83 constitucional, que fue reformado en 2014.

Así, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, a diferencia del de otros, no durará seis años en el cargo sino dos meses menos. 

Esto se debe a que la reforma modificó que la nueva administración comenzara el 1 de diciembre, precisamente, por considerar que la duración de la transición gubernamental impedía al nuevo gobierno incidir en el presupuesto para el primer año de mandato.

“En el caso del presupuesto también se está empezando a trabajar de manera conjunta. Desde luego, es la presidenta electa la que tiene la decisión porque, aunque a nosotros nos toque elaborar una parte, a ella le va a tocar enviarlo, y pues va a ser el presupuesto que va a ejercer”, dijo López Obrador en la conferencia matutina del 9 de julio de 2024. 

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