El Presidente y Rodríguez Larreta están "satisfechos" con los resultados de la cuarentena estricta

El presidente Alberto Fernández y el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, quedaron "satisfechos" con los resultados que dejaron los tres primeros días de la cuarentena estricta en la Ciudad de Buenos Aires.

Durante 45 minutos analizaron los números y resaltaron que la circulación cayó un 33 por ciento. El balance es "positivo". Según confiaron fuentes oficiales, no hablaron de cómo será el futuro de la cuarentena y dela posibilidad de que la Ciudad se desacople de la provincia de Buenos Aires. Hoy, el reporte diario de contagios, volvió a mostrar diferencias entre los dos distritos: Buenos Aires sumó 1849 nuevos enfermos, mientras que la Capital sigue en el promedio de los 800 (835).

Rodríguez Larreta llegó pasadas las 16 a la residencia oficial con una carpeta con números: La cantidad de pasajeros en los colectivos bajó un 30% y la circulación de los autos bajó del 55% -en comparación con los números prepandemia- al 42%.

Además, el jefe de gobierno porteño le dio detalles de cómo avanza el plan Detectar, que ya se lanzó en todos los barrios, pero que también se puso el foco en la Policía de la Ciudad y los trabajadores de la salud de los geriátricos. Según informó el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, ayer se realizaron 1706 hisopados de los cuales 44,1% dieron positivos.

El encuentro, que se dio en el despacho del jefe del Estado en la quinta presidencial de Olivos, se dio en momentos en que desde Uspallata comenzaron a dejar trascender que el gobierno porteño tiene definido volver a la fase 3, aunque eso implique romper el acuerdo con la provincia de Buenos Aires para trabajar como un solo distrito al área metropolitana, que integran la Capital y 35 municipios del Gran Buenos Aires.

Es que, como adelantó LA NACION, el equipo de Rodríguez Larreta observa con cierto entusiasmo la estabilización de los contagios en los últimos días y si el próximo 17 de julio esa tendencia se consolida (o mejora), el gobierno porteño reabrirá todas las actividades comerciales y recreativas.

Si los números se mantienen, esa será la discusión de fondo que deberán saldar el Presidente, el jefe de Gobierno y el gobernador bonaerense, Axel Kicillof.

"Es una cuarentena larguísima y mucha gente ya no la puede sostener", admitió en las últimas horas Quirós.

Fernández, Rodríguez Larreta y Kicillof anunciaron el último viernes la puesta en marcha de un aislamiento mucho más estricto en la Ciudad y en el Gran Buenos Aires ante el avance de la circulación del virus. Para eso, reforzaron los controles en el transporte público, reservado solo para trabajadores esenciales, el cierre de comercios y en los accesos a la Capital.

El dato que generó la marcha atrás fue la ocupación de las camas de terapia intensiva, que según el último registro oficial difundido por el Ministerio de Salud de la Nación alcanzó, en el AMBA, el 55 por ciento. Hoy, en la Ciudad, hay 221 personas en terapia intensivas; 761 personas que cursan la enfermedad en condiciones moderadas y 3305, leves.