Presidente de Colombia no descarta asistir a la juramentación de Nicolás Maduro
Su cancillería ha dicho que “‘hay muchas dudas” sobre la reelección de Nicolás Maduro y él mismo ha reconocido que realizar los comicios fue un error, pero el presidente colombiano Gustavo Petro no descarta viajar a Caracas el próximo mes para estar presente en la juramentación del hombre fuerte venezolano para un nuevo período presidencial.
“Ahora me dicen que no vaya a Venezuela. Yo veré si voy o no voy”, dijo Petro el jueves en un evento transmitido por televisión, antes de recordar, a modo de explicación, su pasado revolucionario como integrante del M19.
“Dentro de mí están los principios que creo fueron por los cuales luchó Bolívar, que era una democracia justa, y por los cuales se fundó el M19, por unos caribeños de Ciénaga y de Santa Marta, y algún profesor constitucional en Barranquilla”, expresó.
Petro, quien en agosto del 2022 se convirtió en el primer presidente izquierdista de Colombia, formó parte activa de la organización de guerrilla urbana, más recordada por el asalto armado del Palacio de Justicia de 1985, en el que murieron más de 100 personas, incluyendo 11 magistrados.
Los comentarios de Petro extienden la ambigüedad mostrada por el gobierno colombiano en torno a las controversiales elecciones del 28 de julio en Venezuela, cuyos resultados anunciados a favor de Maduro han sido rechazados por Estados Unidos y un número cada vez mayor de países.
En recientes declaraciones brindadas por el vicecanciller Jorge Rojas, el gobierno colombiano admitió desconfiar sobre el anuncio formulado por el régimen venezolano, declarando que Maduro derrotó al opositor Edmundo González por un margen de 52% a 43%.
“Los resultados electorales tienen muchas dudas. Nos preocupa la transparencia en ese proceso. No reconocemos un resultado específico”, dijo Rojas a periodistas la semana pasada.
El propio Petro ha dado señales de que no cree en el resultado anunciado por el régimen, manifestando la semana pasada que los venezolanos “ya no saben si [el sistema de gobierno] es democracia, ya no saben si es revolución” pero que en definitiva, “ya el pueblo no los quiere”.
Esas declaraciones, sin embargo, distan mucho de la posición adoptada por Washington y otros países democráticos que reconocen a González como el verdadero presidente electo del país.
La oposición venezolana asegura que González ganó la elección, por una relación de 67% a 30%, y para demostrarlo publicó las actas electorales producidas por el 79% de las máquinas de votación. Hasta el momento el régimen no ha logrado presentar las actas que confirman su victoria pese a los repetidos llamados de la comunidad internacional para que lo haga.
A pesar de las dudas de Bogotá en torno a la elección, Rojas dijo que el gobierno colombiano tomó la decisión de mantener las relaciones con el régimen de Caracas. Según el vicecanciller, la decisión fue tomada en vista a que las decisiones anteriores de suspender las relaciones con Venezuela no brindaron los resultados esperados.
“Colombia mantiene las relaciones con Venezuela”, dijo. “La ruptura de relaciones y el cierre de fronteras no logró los objetivos que se habían planteado” y preservar la relación diplomática le permitirá a Colombia “seguir exigiendo que se respeten los derechos humanos, y que se respete a la oposición”.
Para los analistas, Colombia es uno de los países que más tiene que perder si Maduro permanece en el poder en medio de las acusaciones de que su régimen cometió un nuevo fraude electoral. Varias encuestas han develado que cientos de miles de venezolanos están dispuestos a emigrar si el gobernante se mantiene en el poder, sumándose a los cerca de ocho millones que ya lo han hecho.
Colombia es el país de la región que se ha visto más afectado por el éxodo migratorio venezolano y actualmente alberga a 2.85 millones de ciudadanos del vecino país.