Preocupación en el SPD: Scholz arranca ya la campaña electoral en Alemania ante los malos augurios

El Partido Socialdemócrata Alemán (SPD) ha celebrado este sábado en Berlín el primer acto de campaña previo a las elecciones anticipadas que tendrán lugar el próximo año. Sus miembros fueron recibidos en la sede del partido por manifestantes que exigían la prohibición inmediata del partido de extrema derecha Alternativa para Alemania (AfD).

En el interior, los líderes del partido, Saskia Esken y Lars Klingbeil, han pronunciado discursos prometiendo seguir siendo un partido para los trabajadores. El canciller alemán, Olaf Scholz, ha subrayado esta posición en su primer discurso de la campaña electoral.

El socialdemócrata aseguró que el partido de la oposición, la democristiana CDU, se encuentra actualmente muy distanciada de la formación que lideró la ex canciller Angela Merkel durante 16 años. Scholz añadió que los conservadores moderados se han distanciado de sus valores sociales, y advirtió contra sus políticas conservadoras en temas como las pensiones.

Varios militantes del SPD protestan contra el partido ultraderechista AfD
Varios militantes del SPD protestan contra el partido ultraderechista AfD - Liv Stroud

Tanto Scholz como Esken han criticado al partido liberal FDP y al ex ministro de Economía Christian Lindner por sabotear "deliberadamente" la coalición, después de que esta semana saliese a la luz que el FDP tenía planeado abandonar el Gobierno en torno a las elecciones estadounidenses.

Aunque el ambiente en el congreso ha sido festivo, el SPD se encuentra actualmente en tercer lugar en las encuestas, por detrás de CDU y AfD.

Scholz ha asegurado que, de ser reelegido, el SPD impulsará viviendas asequibles y mejorará la tasa de paro, ya que varios de los gigantes alemanes, entre ellos Volkswagen y ThyssenKrupp, han anunciado recortes masivos de puestos de trabajo. Las perspectivas de crecimiento para Alemania, por detrás de otros países avanzados como España, no son demasiado halagüeñas.

El canciller también se distanció de Bruselas, prometiendo evitar que las empresas alemanas sean multadas a partir del año que viene por la UE si incumplen las normas de emisiones. También instó a frenar la escalada de aranceles con China.

A pesar de las críticas al equipo de redes sociales del SPD por su agresiva campaña, parece que el partido ha pasado a la ofensiva en un intento de conservar votos. Con el resto de Europa girando a la derecha, pocos gobiernos socialdemócratas resisten en Europa.