¿A quién prefieren los electores? A Taylor Swift

Taylor Swift es muy popular entre los posibles votantes. Material visual de datos de encuesta de NYT/Siena
Taylor Swift es muy popular entre los posibles votantes. Material visual de datos de encuesta de NYT/Siena

Si se piensa con detenimiento, Taylor Swift ha estado en campaña —mediante su gira de conciertos Eras, que comenzó en marzo de 2023— durante casi tanto tiempo como un candidato presidencial típico que llega hasta el final. Ha estado en más de una decena de estados y ha actuado ante cientos de miles de personas. Incluso fue al Supertazón.

Pero no es por eso que The New York Times comprobó la “calificación favorable” de Swift en su más reciente encuesta presidencial, entre probables votantes a nivel nacional.

La semana pasada, Swift apoyó la candidatura a la presidencia de la vicepresidenta Kamala Harris, tras meses de especulaciones, creando un frenesí de cobertura informativa y análisis de su posible impacto en la campaña.

Según una encuesta del New York Times, el Philadelphia Inquirer y el Siena College, realizada entre el 11 y el 16 de septiembre —después del debate y del apoyo de Swift, que tuvo lugar inmediatamente después—, el 44 por ciento de los posibles votantes a nivel nacional tiene una opinión favorable de la estrella de la música, mientras que el 34 por ciento tiene una opinión desfavorable de ella.

Swift publicó su apoyo en Instagram, escribiendo que apoyaba a Harris “porque lucha por los derechos y las causas que creo que necesitan una guerrera que los defienda. Creo que es una líder con mano firme y talento, y creo que podemos conseguir mucho más en este país si nos guía la calma y no el caos”.

El Times nunca había encuestado a los votantes sobre Swift, pero parece que su decisión ha dividido rápidamente a los estadounidenses en líneas partidistas. Entre los demócratas, el 70 por ciento la ve con buenos ojos, frente al 23 por ciento de los republicanos.

Entre los que tienen una opinión desfavorable, por supuesto, está el expresidente Donald Trump, quien, durante el fin de semana, escribió en una publicación en Truth Social: “¡ODIO A TAYLOR SWIFT!”.

Cabe preguntarse si una letra bien seleccionada —por ejemplo, “Y habría sido algo muy dulce, si hubiera sido yo”— por Trump podría haber suscitado al menos cierta simpatía entre los swifties, quienes, a través de sus canciones, están íntimamente familiarizados con el desamor y el rechazo.

Según la encuesta Times/Inquirer/Siena, el 47 por ciento de los votantes ve a Trump con buenos ojos, mientras que el 51 por ciento lo ve con malos ojos. Harris es vista favorablemente por el 48 por ciento de los votantes y desfavorablemente por el 49 por ciento.

En las semanas previas al apoyo de Swift, Trump compartió en internet memes falsos, generados por inteligencia artificial, que sugerían que ella le había brindado su apoyo. Swift se refirió a esa desinformación en su apoyo de la semana pasada: “Me llevó a la conclusión de que tengo que ser muy transparente sobre mis planes reales para esta elección como votante. La forma más sencilla de combatir la desinformación es con la verdad”.

De los encuestados en el sondeo, otro 22 por ciento dijo no saber qué opinaba de Swift, declinó decir qué opinaba de ella o no sabía quién era ella. Estos votantes, como no debería sorprender a nadie, eran especialmente mayores de 65 años y varones.

c.2024 The New York Times Company