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Precios al consumidor de EEUU registran primer declive en siete meses

WASHINGTON (Reuters) - Los precios al consumidor de Estados Unidos bajaron imprevistamente en agosto al reanudar su caída el costo de la gasolina, al tiempo que la fortaleza del dólar limitó los valores de otros productos, dijo el miércoles el Departamento de Trabajo. Esto apuntó a una inflación contenida, lo que complica la decisión de la Reserva Federal, que evalúa una posible subida de tasas de interés. El índice de precios al consumidor cayó un 0,1 por ciento el mes pasado, la primera baja desde enero, tras subir un 0,1 por ciento en julio. Los economistas encuestados por Reuters habían previsto un dato sin cambios en agosto. En los 12 meses a agosto, el IPC aumentó 0,2 por ciento tras un avance similar en julio. Las señales de reafirmación de la tendencia de desinflación contrastan mucho con el rápido ajuste del mercado laboral y ponen de relieve el dilema que enfrentan las autoridades de la Fed mientras contemplan subir las tasas de interés por primera vez en casi una década. El comité de tasas del banco central estadounidense tiene previsto comenzar su encuentro de dos días el miércoles. Si bien los datos sólidos del consumo, las viviendas y el empleo han respaldado los argumentos a favor de un alza de tasas, eso fue socavado por la reciente turbulencia de los mercados financieros globales. La lentitud de las alzas salariales y la fortaleza del dólar han contribuido a mantener la inflación por debajo de la meta de la Fed, de 2 por ciento. Para la variación anual, los economistas habían proyectado un alza de 0,2 por ciento. El llamado IPC subyacente, que descarta los costos de los alimentos y la energía, ascendió 0,1 por ciento el mes pasado tras un aumento similar en julio. Esto reflejó el impacto del dólar en el costo de los productos importados. En los 12 meses a agosto, el IPC estructural creció 1,8 por ciento. Fue la quinta vez en seis meses que refleja un aumento de 1,8 por ciento. La Fed rastrea el índice de precios basado en el consumo personal, sin contar alimentos ni energía, que está bastante por debajo del IPC subyacente. El mes pasado, el precio de la gasolina se retrajo un 4,1 por ciento, la mayor caída desde enero, tras aumentar 0,9 por ciento en julio. Los precios de los alimentos avanzaron 0,2 por ciento, impulsados por el costo de los huevos, que ascendió 7,7 por ciento. (Reporte de Lucia Mutikani. Editado en español por Gabriel Burin)