Anuncios

Sánchez apuesta por elecciones anticipadas en España tras la derrota en las autonómicas

Por Belén Carreño y Inti Landauro

MADRID (Reuters) -El presidente del Gobierno español, el socialista Pedro Sánchez, convocó inesperadamente elecciones nacionales el lunes, en un aparente intento de confundir a sus oponentes conservadores y dar a su debilitado partido socialista la mejor oportunidad de conservar el poder antes de perder aún más apoyo.

Sánchez, que ha manifestado en repetidas ocasiones su deseo de prolongar su mandato, hizo el inesperado anuncio un día después de que los partidos de izquierda fueran derrotados en unas elecciones regionales.

Su decisión de adelantar las elecciones de finales de 2023 a julio tomó por sorpresa a la mayor parte de su Gobierno e incluso a algunos miembros de su círculo más cercano, según fuentes próximas al presidente del Gobierno.

Sin embargo, mientras el líder de la oposición conservadora, Alberto Núñez Feijóo, pedía a los votantes que lo conviertan en el próximo líder de España, los expertos políticos dijeron que Sánchez —cuya reputación como político arriesgado ya está bien establecida— había apostado a que sus rivales no estarían preparados para librar una campaña coordinada para los comicios del 23 de julio.

Sánchez describió la aplastante derrota del domingo como un claro voto de desaprobación a su Gobierno de coalición y dijo que se sentía obligado a asumir "personalmente" la responsabilidad de los resultados.

El Partido Popular (PP) de Alberto Núñez Feijóo se hizo con el control absoluto de dos Gobiernos regionales y podría gobernar otros seis en alianza con el partido de extrema derecha Vox, cuyo líder, Santiago Abascal, se mostró dispuesto a formar coaliciones con el PP. En total, se disputaron 12 regiones.

Sánchez dijo que ahora necesitaba "una clarificación sobre la voluntad de los españoles y las españolas, una clarificación sobre las políticas que debe aplicar el Gobierno de la nación y una clarificación sobre las fuerzas políticas que deben liderar esta fase".

"Creo necesario dar una respuesta y someter nuestro mandato democrático a la voluntad popular", dijo en un discurso televisado.

Los resultados del domingo indican que el PP y el partido ultraderechista Vox podrían desbancar a Sánchez y al PSOE si repiten esa actuación a nivel nacional.

"Mejor cuanto antes", dijo Alberto Núñez Feijóo en rueda de prensa, y pidió a los votantes que den a su partido una "mayoría clara" para gobernar el país.

"Pido desde ya una mayoría clara, contundente e incontestable para iniciar un nuevo rumbo", dijo, y añadió que había mantenido conversaciones informales con Vox sobre el resultado de las elecciones del domingo.

El líder de Vox, Santiago Abascal, dijo que su partido estaba abierto a crear una "alternativa" a Sánchez formando coaliciones de Gobierno nacionales y regionales con el PP.

¿EL FANTASMA DE LA EXTREMA DERECHA?

Sánchez había dicho previamente que las elecciones nacionales serían en diciembre, y es raro que un Gobierno español convoque unas elecciones anticipadas tras unas elecciones regionales poco favorables, especialmente cuando gran parte del país estará de vacaciones.

Pablo Simón, catedrático de Ciencias Políticas de la Universidad Carlos III de Madrid, afirmó que la estrategia de Sánchez puede consistir en recabar apoyos agitando el fantasma de un primer partido de extrema derecha en el Gobierno desde la muerte del dictador Francisco Franco en 1975, en un momento en que España ocupará también la presidencia semestral de la UE.

"Si lo que aspira es movilizar a la izquierda con el miedo a Vox, se van a atravesar en este tiempo las negociaciones de Vox con el PP durante todo este periodo", dijo Simón.

Fuentes cercanas al presidente del Gobierno aseguraron que casi nadie dentro del Gobierno conocía de antemano su decisión.

"La medida nos ha pillado por sorpresa, pero ahora que lo sabemos, es el gesto valiente que necesitamos para ganar", dijo un alto cargo del Gobierno.

David Hernández Martínez, catedrático de Relaciones Internacionales de la Universidad Complutense de Madrid, dijo que Sánchez había esperado utilizar la presidencia española de la UE para venderse a los votantes como un estadista internacional, y "esto trastoca enormemente los planes".

Sin embargo, el presidente del Gobierno se ha hecho conocido por asumir riesgos políticos inesperados.

Asumió el cargo en junio de 2018 al ganar la primera moción de censura de la historia de España, con la que se destituyó al presidente del Gobierno del PP, Mariano Rajoy, tras negociar un pacto con los partidos independentistas catalanes y vascos.

La fragilidad de su Gobierno de coalición le obligó a convocar elecciones anticipadas dos veces en 2019.

El domingo, mientras que según datos oficiales el PSOE perdió 400.000 votos en comparación con las elecciones locales de 2019, su socio de coalición de extrema izquierda Podemos, de creación más reciente, perdió terreno en todos los ámbitos, lo que debilita aún más la posición de Sánchez.

Tanto el PP como el partido antiinmigración Vox obtuvieron mejores resultados de lo previsto.

El PP obtuvo la mayoría absoluta en Madrid, la capital, mientras que los socialistas perdieron el control de Valencia, Aragón y Baleares, así como su bastión del suroeste, Extremadura, y las ciudades de Valencia y Sevilla.

(Información de Belen Carreño, David Latona e Inti Landauro; redacción de Charlie Devereux y John Stonestreet; edición de John Stonestreet y Aislinn Laing; editado en español por José Muñoz, Darío Fernández, Benjamín Mejías Valencia y Flora Gómez)