Por qué aumenta la violencia de género en Argentina y qué podría detenerla

El número de feminicidios aumentó durante los primeros dos meses del año, pese a las grandes marchas para reclamar igualdad de derechos y medidas para frenar los crímenes.

Mario Cippitelli – Neuquén, Argentina – @Chipitelix

Argentina tiene algunas características por las que no parece un país machista, como, por ejemplo, el gran poder de movilización de las mujeres que se fortalece con el paso del tiempo y la presión que estos movimientos ejercen en la opinión pública.

Sin embargo, los indicadores dicen lo contrario. Después de un 2016 cargado de violencia en el que se contabilizó un feminicidio cada 30 horas, el 2017 comenzó con estadísticas aterradoras: en los primeros 45 días de 2017 hubo 44 muertes vinculadas con este flagelo, por lo que las proyecciones son para nada alentadoras.

Crímenes de jóvenes, familias completas masacradas a modo de venganza (feminicidios vinculados) y violaciones reiteradas completan un abanico macabro que comienza a desplegarse con fuerza ante la desprotección y el espanto de millones de mujeres.

¿Cómo es posible que después de masivas marchas y pronunciamientos de rechazo de toda la sociedad argentina, no solo sigan ocurriendo estos crímenes sino que se hayan incrementado?

La licenciada y politóloga Valeria Amstein, referente de la agrupación Mujeres de la Matria Latinoamericana (MuMaLa) aseguró que el origen del problema está relacionado con la falta de políticas de Estado, tanto en el tema de Educación, como en las acciones necesarias para proteger a las mujeres.

Posible significado del fenómeno

“Los feminicidios son una reacción, no en términos individuales, sino de un sistema que está vigente frente al reclamo de nuestros derechos”, dijo Amstein a Yahoo. “Son reacciones que las entendemos como mensajes”, agregó.

La licenciada opinó que estos asesinatos siguen ocurriendo porque son una forma de demostración de que se pueden hacer (una especie de desafío) y que, en efecto, después se siguen cometiendo pese a la lucha que protagonizan las mujeres para defender y reclamar por sus derechos.

Aclaró que los crímenes de mujeres son situaciones extremas, pero que todos los días hay actitudes en la sociedad que están relacionadas con la violencia de género. “Cuando se asesina a toda una familia completa – como ocurrió este año- se está transmitiendo de que eso se pude hacer y que es posible de hacerlo”, dijo Amstein, quien reiteró que es fundamental la participación de los gobiernos.

De hecho, la referente de MuMala sostuvo que las mujeres vienen avanzando por abajo en términos sociales, pero que el Estado sigue ausente con medidas efectivas. Consideró que dentro de esas políticas, un pilar fundamental es la educación, ya que a partir de la enseñanza y la toma de conocimientos se está construyendo un modelo de sociedad.

También indicó que otro de los temas pendientes es la legalidad del aborto, algo que, por ahora, aparece como tabú y paraliza a la dirigencia política.

¿Argentina es un país machista?

En ese contexto, la sociedad argentina intenta avanzar y romper con estos códigos de violencia con el reclamo de igualdad de las mujeres y tiene algunas reacciones que generan esperanza, como las marchas que se realizan en distintas ciudades del país o los encuentros nacionales que se organizan en cada una de las provincias todos los años.

“Lo bueno es que Argentina tiene un poder de movilización de mujeres único en el mundo y esto ayuda a visualizar el problema de la violencia de género”, opinó Amstein. En ese sentido, anticipó que la marcha que se realizará este 8 de marzo con motivo del Día Internacional de la Mujer será masiva como otras tantas concentraciones que se llevaron a cabo recientemente en el país.

Consideró que el paro de mujeres que acompañará a esa movilización será un hecho histórico y un punto de inflexión. “Es un salto cualitativo a la hora de reclamar por nuestros derechos”, dijo.