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Escuela envía la policía a casa de un niño por jugar con una pistola de jueguete

Escuela envía la policía a casa de un niño por jugar con una pistola de jueguete

Las clases han empezado a gran escala en Estados Unidos, mayormente en la modalidad en línea para reducir la propagación del covid-19. Pero para un chico de 12 años de Colorado Springs, Colorado, el año escolar ha empezado de un modo especialmente punzante.

Isaiah Elliott estaba en su tercer día de clases en línea el pasado 27 de agosto, y tomaba una de ellas vía internet en su casa con un compañero cuando tomó una pistola de juguete e hizo un movimiento con ella de modo que la mostró cruzando la pantalla de su computadora.

Eso desató las alarmas.

La clase en línea estaba siendo grabada y su profesora, tras ver al niño mostrar la pistola de juguete brevemente en la pantalla, reportó el hecho a la directiva de la escuela.

La madre del niño dijo que él padece trastorno de déficit de atención con hiperactividad, lo que hace que se distraiga con frecuencia.

Entonces, de acuerdo al relato de Buzzfeed News, la directiva de la escuela Grand Mountain School tomó una decisión controversial. La maestra de Isaiah le escribió a la madre un email en la que le dijo que el niño había estado “extremadamente distraído” en la clase en línea y le mencionó el “muy serio problema de ostentar una pistola de juguete”.

Eso les había causado tal preocupación que aunque la madre le dijo a la maestra que se trataba de una pistola de juguete, las autoridades escolares decidieron enviar a un oficial de policía escolar a la casa de la familia Elliott ante su inquietud por la seguridad de Isaiah. Aunque “asumían” que era de juguete, no podían estar completamente seguros de ello, se indicó.

La madre del niño, con todo, reprochó luego a la escuela que hubiesen enviado policías a su casa antes de avisarle a ella del asunto. Ella llamó de inmediato a su esposo para reportarle urgentemente lo sucedido, y el padre del menor logró así estar presente cuando los oficiales se presentaron en su vivienda. Ella y su esposo han defendido en todo momento a su hijo.

Al llegar, los oficiales le mostraron al padre del niño el video de la clase cuando se dio el momento en que apareció la pistola de juguete y la pareja también criticó que esa grabación se hubiese realizado, pues hasta donde sabían no le habían preguntado a los padres de familia de la escuela si estaban de acuerdo con que se grabaran las clases virtuales. Eso fue para los padres de Isaiah una nueva práctica reprochable de la escuela.

La directiva de la escuela, por su parte, dijo que la “seguridad será siempre número uno para nuestros estudiantes y personal”. Y en su lógica cabe preguntarse qué habría pasado si, teniendo una duda sobre si la pistola era real o no, en ese plantel se hubiese optado por no hacer nada y se hubiese registrado una tragedia.

En todo caso, la escuela suspendió a Isaiah cinco días e, incluso, de acuerdo a The Washington Post, al parecer también envió oficiales a la casa del niño que estaba con Isaiah el día del incidente y suspendió también a ese menor.

El padre de Isaiah, con todo, lo ve de un modo distinto. Dijo que en cierto modo fue la propia directiva escolar la que incrementó los riesgos para su hijo al enviar policías a su casa, y recordó el incidente de Tamir Rice, un niño que en 2014 jugaba con una pistola de juguete y murió tras ser baleado por un policía que reaccionó de modo brutal contra el menor.

Afortunadamente el caso de Isaiah no llegó a tal extremo, pero sus padres también critican que la escuela haya incluido en el expediente de su hijo una nota de suspensión en la que, de acuerdo a Buzzfeed, se señala que el niño fue culpable de “violar los procedimientos y políticas del distrito y del edificio” y de incurrir en “conductas dentro o fuera de la propiedad de la escuela que va en detrimento del bienestar, la seguridad o la moralidad de otros estudiantes o del personal de la escuela”.

Por añadidura, se añadió que “Isaiah exhibió y agitó el facsímil de un arma de fuego durante una clase virtual el pasado 27 de agosto de 2020”.

Los padres del niño criticaron que la escuela redactó esa nota de modo que pareciera que su hijo llevó esa pistola de juguete a la escuela y afectó con ella a su clase, cuando en realidad todo habría sido producto de una distracción del menor realizada en su propia casa.

Una nota de esa índole, añadieron, podría hacer pensar que el niño es peligroso y afectar con ello su futuro, lo que resultaría para sus padres no solo censurable sino completamente injusto.

La suspensión que se le impuso al niño ya terminó, pero sus padres tenían previsto sacar a su hijo de esa escuela e inscribirlo en otra, proceso que actualmente se encuentra en trámite.

Y, remata Buzfeed, la madre del niño dijo que “tener juguetes en casa es algo de lo que nunca pensé que tendría que enfocarme... Nunca cruzó por mi mente que esos juguetes pudieran ser vistos como una amenaza”.

Pero eso sucedió, quizá por una conclusión prejuiciada sobre el posible hecho de que un niño afroamericano pudiese tener un arma, quizá por una valoración exagerada del riesgo de que no se tratase de una pistola de juguete sino de una real. En todo caso, la madre del chico dijo, de acuerdo a The Washington Post, que “nunca pensé que uno no pudiera jugar en casa con una pistola Nerf porque alguien puede percibirlo como una amenaza y enviarte por ello a la policía”.

En todo caso, los padres de Isaiah lanzaron una campaña en Change.org (https://www.change.org/p/department-of-education-hold-district-3-administrators-accountable-for-their-negligent-actions-isaiahstrong) para exigir que el distrito escolar y la directiva de la escuela rindan cuentas por sus “acciones negligentes”.