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La policía de Hong Kong dispersa a los manifestantes con gas pimienta

Unos trabajadores pasan junto a oficinales de policia antidisturbios en Hong Kong, China

Por Sarah Wu y Jessie Pang

HONG KONG, 27 may (Reuters) - La policía antidisturbios de Hong Kong disparó proyectiles con pimienta para dispersar a los manifestantes en el corazón del centro financiero el miércoles, en un contexto de resurgimiento de las movilizaciones antigubernamentales por las nuevas leyes de seguridad nacional propuestas por Pekín.

La policía también rodeó el Consejo Legislativo, donde se iba a debatir un proyecto de ley que criminalizaría la falta de respeto al himno chino, en medio de las crecientes tensiones por las supuestas amenazas a las libertades de la ciudad semiautónoma.

Personas de todas las edades salieron a las calles, algunas vestidas de negro, otras con ropa de oficina y otras ocultando su identidad con paraguas abiertos, en escenas que recordaban los disturbios que convulsionaron la ciudad el año pasado.

"Aunque en el fondo tengas miedo, tienes que hablar", dijo Chang, de 29 años, una oficinista y manifestante vestida de negro con un casco con respirador y gafas en la mochila.

La convocatoria para reunirse alrededor del Consejo Legislativo fue abandonada debido a la fuerte presencia de policía antidisturbios.

Muchas tiendas, sucursales bancarias y edificios de oficinas cerraron antes de tiempo. Se podía ver a decenas de personas acorraladas por la policía antidisturbios y obligadas a sentarse en la acera.

Las protestas han vuelto a las calles de Hong Kong después de que Pekín propusiera nuevas leyes de seguridad nacional para hacer frente a la secesión, la subversión y las actividades terroristas. Las leyes previstas podrían hacer que organismos de inteligencia chinos establecieran sedes en la ciudad semiautónoma.

La medida desencadenó el domingo los primeros disturbios de gran magnitud en las calles de Hong Kong en meses, y la policía disparó gas lacrimógeno y cañones de agua para dispersar a los manifestantes.

Estados Unidos, Australia, Reino Unido, Canadá y otros países han expresado su preocupación por la legislación, que algunos consideran un punto de inflexión para la ciudad, uno de los principales centros financieros del mundo.

La policía dijo que el miércoles había arrestado al menos a 16 personas, de entre 14 y 40 años de edad, por presuntos delitos como la posesión de armas o herramientas de uso ilegal y la conducción peligrosa.

(Información de Sarah Wu y Scott Murdoch; escrito por Anne Marie Roantree y Michael Perry; editado por Lincoln Feast y Stephen Coates; traducido por Tomás Cobos)