Fallas de mantenimiento e irregularidades en la cocina: las violaciones del lujoso club de Trump que cobra 200.000 dólares anuales por membresía

Mar-a-Lago, la llamada “Casa Blanca de invierno” del presidente Trump, ha vuelto a sacar malas notas en las inspecciones requeridas por el estado de Florida.

Inspecciones realizadas en noviembre a las dos cocinas principales del club de West Palm Beach arrojaron un total de 15 violaciones.

Foto de Newsweek
Foto de Newsweek

Entre estas violaciones se encuentran: el personal no pudo precisar la frescura de los alimentos potencialmente peligrosos, incluida una salsa de curry fechada el 21 de octubre sacada del congelador y marcada incorrectamente; la leche estaba almacenada a 49 grados Fahrenheit en lugar de la temperatura segura de 41 grados, y cajas de perros calientes almacenadas en piso de una habitación refrigerada.

Pueden parecernos deslices nimios, pero vale la pena recordar que se trata del sitio donde comen el presidente de Estados Unidos y sus invitados y cuya membresía cuesta ¡200.000! dólares anuales.

Además, hay que decirlo, Mar-a-Lago ha mejorado en comparación con el año pasado, cuando días antes de la visita estatal del primer ministro japonés Shinzo Abe en febrero de 2017, los inspectores encontraron pescado listo para el consumo sin el tratamiento obligatorio de parásitos y citaron al club por almacenar alimentos en dos refrigeradores rotos a temperaturas que estropean los ingredientes frescos.

Pero no sólo en la cocina se hallaron irregularidades.

El Bed and Breaksfast -hotel- de la instalación debió someterse a reparaciones de emergencia para pasar la última inspección en noviembre.

Una inspección inicial el 8 de noviembre detectó dos violaciones consideradas de alta prioridad: la falta de detectores de humo capaces de alertar con luces brillantes; y las losas de concreto que faltaban en una escalera, dejando al descubierto barras de refuerzo de acero que podrían causar la caída de alguna persona.

“Las violaciones de alojamiento de alta prioridad son aquellas que podrían representar una amenaza directa o significativa para la salud pública, la seguridad o el bienestar”, dice el código de inspección, citado por el diario The Miami Herald.

El club fue revisado nuevamente el 17 de noviembre, una semana antes del regreso de Trump para sus vacaciones de Acción de Gracias, y esta vez “cumplió con los estándares de inspección”, según el informe de inspección estatal.

La histórica casa principal de la hacienda de 20 acres fue construida en la década de 1920 para la heredera de cereales Marjorie Merriweather Post, y Trump la compró en 1985.

El presidente también pasó Navidad de 2017 y esperó el Año Nuevo en su propiedad.