Pese a gol de Kane, Tottenham sucumbe en Burnley

Ashley Barnes anota el segundo gol de Burnley en la victoria 2-1 ante Tottenham Hotspur por la Liga Premier, el sábado 23 de febrero de 2019. (Martin Rickett/PA via AP)

LONDRES (AP) — Después que Tottenham cediera terreno en la puja por el título de la Liga Premier, Mauricio Pochettino también perdió los estribos.

El técnico argentino de Tottenahm se encaró furioso con el árbitro Mike Dean tras la derrota 2-1 en la cancha de Burnley, descargado su frustración por una decisión que derivó en el primer gol de los anfitriones.

Es inusual verlo enojarse a Pochettino, quien reconoció que su arrebato obedeció a que entendía que la derrota podría haber dado un golpe mortal a las aspiraciones de los Spurs de alcanzar a los líderes Liverpool y Manchester City.

"Ya no podemos vernos como un candidato de verdad. Hemos desperdiciado una enorme oportunidad... cuando te sientes tan decepcionado y enojado, cometes errores. Cometimos algunos errores en la cancha y yo también al final”.

“Se me cruzaron los cables”, añadió. “Fue algo raro y extraño que no me había pasado en 10 años. Se dieron unas cosas tontas y uno reacciona”.

La reacción se dio cuando Chris Wood abrió el marcador con un cabezazo a los 57 minutos tras el cobro de un polémico tiro de esquina. Pochettino y sus jugadores reclamaron que el balón salió por la línea de fondo por contacto de un jugador de Burnley por lo que debía señalarse un despeje del arquero.

Pochettino apeló ante el cuarto juez tras el gol y luego se encaró con Dean al final del partido, en una caldeada discusión con el veterano árbitro.

Tottenham afrontó el partido entusiasmado con la reaparición de Harry Kane, recuperado antes de lo anticipado de una lesión en el tobillo. Pero ni siquiera el gol del delantero de la selección inglesa pudo impedir una costosa derrota.

Kane, en su primer partido desde que lesionó un tobillo el 13 de enero, exhibió su letal pegada al empatar el marcador a los 65 al aprovechar un saque lateral y batir al portero Tom Heaton con un disparo rasante al segundo palo.

Pero Ashley Barnes restableció la ventaja de Burnley a los 83. El atacante nada más tuvo que empujar el balón tras un rechace a un remate previo de Johann Berg Gudmundsson.

Tottenham tenía al alcance acercarse a dos puntos del dúo de líderes, pero se mantiene cinco unidades detrás del equipo de Pep Guardiola y de Liverpool, que podría despegarse a ocho puntos de los Spurs si el domingo vence a Manchester United.

Burnley estiró a ocho su racha de partidos sin perder en la Premier y se distanció seis puntos de la zona de descenso.

En los otros tres partidos disputados el sábado, Newcastle derrotó 2-0 a Huddersfield; Bournemouth igualó 1-1 con Wolverhampton Wanderers; y Crystal Palace goleó 4-1 a Leicester.

PENALES Y ASPERSORES

Bournemouth y Wolverhampton empataron en un partido que tuvo penales, nueve tarjetas amarillas y una interrupción cuando se activaron los aspersores de agua.

El delantero mexicano Raúl Jiménez igualó para los Wolves al transformar una pena máxima a los 83 minutos, nivelando el marcador luego que Joshua King convirtió desde los 12 pasos a los 14. King pudo ganarla para Bournemouth con otro penal, pero lo estrelló contra el poste.

GOL DE RONDÓN

Newcastle logró una importante victoria en la lucha por evitar el descenso frente a un Huddersfield que acabó con 10 hombres y se hundió más en el fondo de la tabla.

Con el volante paraguayo Miguel Almirón de titular por primera vez tras llegar de Atlanta United el mes pasado, el equipo de Rafa Benítez se fue al frente con los tantos del delantero venezolano José Salomón Rondón (46) y el atacante español Ayoze Pérez (52).

RECORD DE HODGSON.

Con un doblete de Wilfried Zaha, Crystal Palace arrasó en su visita a Leicester, partido en el que Roy Hodgson se convirtió en el técnico de mayor edad en dirigir en la Premier.

A sus 71 años y 198 días, Hodgson rebasó la marca de longevidad de Bobby Robson en la Premier, que perduraba desde agosto de 2004.