Los pescadores españoles finalizan su huelga contra los recortes de pesca en el Mediterráneo
Los pescadores en España han concluido este miércoles su huelga de dos días contra los recortes propuestos por la Unión Europea, que limitarían drásticamente los días de pesca en el Mediterráneo.
La Unión Europea busca reducir los días de pesca de los arrastreros mediterráneos en un 79% con el objetivo de mejorar las poblaciones de peces y proteger la biodiversidad, algo que según Javier Garat, presidente del mayor sindicato pesquero de Europa y de la Confederación Española de Pescadores (Cepesca), ya se ha conseguido en los últimos años.
"Después de cinco años de importantes sacrificios del sector se ha reducido un 40% los días de pesca, se han aplicado una serie de medidas técnicas para, por ejemplo, mejorar la selectividad del arrastre para evitar la captura de juveniles", dice Javier Garat en declaraciones a 'Euronews'. Sin embargo, Bruselas está utilizando datos de años anteriores sin tener encuenta la mejora en el medio ambiente.
¿Cómo afectará al sector pesquero español la reducción europea de los días de pesca?
Los manifestantes sostienen que estos recortes afectarían gravemente la economía de España y dañarían a la industria pesquera. En el segundo día de la protesta, algunos pescadores españoles se reunieron frente a la sede de la Comisión Europea en Madrid, exigiendo que se detenga la propuesta que actualmente se negocia en Bruselas.
La propuesta de la Comisión Europea reduciría los 130 días anuales que los arrastreros pueden faenar en la actualidad a solo 27. Por eso, en puertos de regiones como Andalucía, Murcia, Valencia, Cataluña y otras, los pescadores y trabajadores de las lonjas de pescado cesaron su actividad como parte de la protesta.
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La manifestación ha sido promovida por la Federación Nacional de Cofradías de Pescadores y la patronal Cepesca, que denuncian que, si la propuesta se aprueba, la pesca de arrastre en el Mediterráneo desaparecerá.
Representantes del sector pesquero coinciden en que la medida podría llevar al fin de esta modalidad de pesca, que da empleo a unas 3.000 personas directamente y genera alrededor de 17.000 puestos de trabajo de forma indirecta.