Pensaban que era una barriga cervecera y resultó ser un tumor de 77 libras

Dr. William Tseng eliminó el tumor de 77 libras de Héctor Hernández en julio. (Photo:USC/Cortesía de Hector Hernandez para Yahoo Lifestyle)
Dr. William Tseng eliminó el tumor de 77 libras de Héctor Hernández en julio. (Photo:USC/Cortesía de Hector Hernandez para Yahoo Lifestyle)

Héctor Hernández era objeto constante de bromas de sus amigos debido a una creciente “barriga cervecera”, a pesar de que él mismo no es fan de la popular bebida. Cuando tomaba el metro de Los Ángeles para ir a trabajar todas las mañanas, la gente lo miraba.

“Usaba chaquetas grandes para tratar de cubrirme, pero era muy notable”, dijo en una entrevista con The Washington Post.

Y cuando se sentaba en su escritorio en una compañía de tecnología de la información, “mi estómago simplemente se apoyaba entre mis piernas”, dijo.

Empezó a hacer una dieta pero no bajó de peso. Y el resto de su cuerpo se tornaba más delgado. Cuando se decidió a ir al médico, supo que su barriga era en realidad un tumor de 77 libras (o 35 kilos) que estaba creciendo dentro de él.

Héctor Hernández con el tumor y sin él. Foto: People.
Héctor Hernández con el tumor y sin él. Foto: People.

Hernández fue diagnosticado con un liposarcoma retroperitoneal, un cáncer que se inició en las células de grasa de la parte superior de su abdomen. Al ser indoloro, el tumor fue creciendo tanto en tamaño que modificó la complexión de su cuerpo. Pero ¿quién iba a imaginar que se trataba de una afección de la salud?

El hombre de 47 años no bebía cerveza, y su ejercicio regular hizo que sus brazos adelgazaran, pero no así su barriga, que mientras aumentaba de tamaño también se endurecía. Fue por eso que se decidió a ir al médico.

Tras ser sometido a una complicada operación de más de seis horas para extirpárselo, regresó a su casa con unas 100 libras menos en su cuerpo, según un comunicado de prensa de la Universidad de California del Sur -lugar adonde Hernández buscó atención.

Él no es el único que puede explicar su aumento de peso debido a un enorme tumor. Uno de los casos que circulan en Internet es el que reportó la CNN en mayo de este año, cuando a una mujer de Alabama se le extrajo un quiste ovárico de unas 50 libras (o 22 kilos), que inicialmente pensó también que se debía a un aumento de peso.

La pregunta entonces es: ¿Cómo puede alguien saber si su aumento de peso se debe a problemas con la dieta o es debido a un tumor?

“Una pista de que puede ser algo diferente a un simple aumento de peso es que éste sea asimétrico, o esté ocurriendo muy rápido”, explica a Yahoo! Lifestyle Margaret von Mehren, jefa de la División de Oncología Médica del Sarcoma y directora asociada del departamento de investigaciones clínicas en el Centro Fox Chase, que se especializa en el cáncer.

Este tipo de tumor generalmente no causa dolor, “pero los pacientes pueden notar un cambio en sus hábitos intestinales (generalmente más lentos) y sentirse llenos más rápidamente”, dice von Mehren. “Además, cuando se acuestan, pueden notar que se sienten incómodos en ciertas posiciones o tienen una sensación de plenitud en un solo lado”.

Otra de las pistas está en la ropa: “puede que no se ajuste a su forma habitual, o estar más apretada en un lado que en el otro”, menciona la especialista, y agrega: “Es posible que si un tumor es grande pueda causar presión en los vasos sanguíneos de las piernas y haya retención de líquidos. Y hay que preocuparse, especialmente si hay hinchazón en una pierna y no en la otra”.

“No hay manera, en términos de sintomatología, de decir definitivamente ‘esto se debe a un cáncer y esto no’”, agrega John Mullinax, un oncólogo quirúrgico en el Departamento de Sarcoma en el Centro Moffitt, también especializado en cáncer y entrevistado por Yahoo Lifestyle. “Cualquier cambio inexplicable en el peso debe ser revisado. No deje pasar cosas que le parezcan extrañas de su cuerpo”, aconseja.