Peleador nicaragüense se ilusiona con ser el primer campeón de su tierra en las MMA
Elvin Espinoza ya es una figura fija en Professional Fighters League. Ahora está listo para demostrarle a la empresa que su techo de talento es superior cuando este 16 de agosto entre a la jaula en el Hard Rock Live del Hard Rock Hotel y Casino de Holllywood, Fort Lauderdale.
No será una noche fácil para el nicaragüense, pues enfrenta a un veterano como Mads Burnell, pero Espinoza ha crecido enormemente al entrenar en un gimnasio como Kill Cliff al lado de algunos de los mejores artistas marciales mixtos del mundo.
De la mano del profesor cubano Dieter Navarro, Espinoza -graduado de ciencia físicas en FIU- entrena con la ilusión de ser el primer guerrero de su país en conquistar una faja importante en las MMA, donde piensa ser como Román “Chocolatito’’ González en el boxeo.
En una entrevista previa soñabas con entrar en PFL, ahora estás dentro.
“Sí, tuve la suerte de ser llamado a un torneo donde vencí a Adam Picolotti, pero luego perdí contra Gadzhi Rabadanov, un ruso que entrena con Khabib Nurmagomedov. A esa pelea fui un poco nervioso, pero se que si nos volvemos a ver le voy a ganar. Mi vida ha cambiado mucho’‘.
Entonces, ¿qué aprendiste de esa derrota?
“Que estoy en el mismo nivel que ellos. El me podía llevar al piso, pero no me podía tener allí. Quizá pensó que me iba a dominar, pero yo siempre me levantaba. Por eso digo que tengo más confianza por si en alguna ocasión volvemos a cruzarnos. No voy a estar nervioso y le voy a dar más golpes’‘.
Y ahora enfrentas a un veterano como Mads Burnell.
“El es muy parecido a Sean Strickland, un boxeador. Tiene buen Jiujitso. El peleó con un compañero de equipo, Adam Borics, quien me dijo que él no tiene ni mejor lucha ni Jiujitsu que yo. Eso me da confianza, aunque le reconozco su experiencia y ha enfrentado buenos rivales. No será fácil, pero le puedo ganar’‘.
¿Cuántos has cambiado como peleador?
“Mucho. Tengo más confianza en mi striking, mi lucha es mejor, al igual que mi Jiujitsu. Estoy entrenando con gente de mucho nivel, más alto que el mío. Gente como Gilbert Burns que siempre me está empujando, como Impa Kasanganay. Tengo buena gente que me están apoyando’‘.
Son gente de Kill Cliff.
“Yo siempre miraba a esos peleadores en la televisión y ahora estoy ahí al lado de ellos entrenando, participando en sus campamentos. Lo que eso significa en términos de confianza es tremendo. Estar con los mejores del mundo te contagia de lo bueno cuando entro en la jaula’‘.
PFL compró Belator, es la segunda mejor empresa de MMA.
“Eso es bueno para el deporte, son dos organizaciones fuertes en una y ahora hay un nivel mayor. Son dos rosters muy fuertes y eso hará que PFL crezca mucho más. Así que lo veo como algo muy positivo
¿Aún vive el sueño de ser el primer campeón nica de MMA?
“Todavía está vivo. Solo tengo una derrota. No se ha perdido este sueño’‘.