El patrimonio millonario que deja Carlos Marín, de ‘Il Divo’

El cantante operístico Carlos Marín falleció hace pocos días a causa del Coronavirus. Luchó contra el virus en un hospital de Manchester pero, desafortunadamente, acabó perdiendo la vida.

El mundo artístico ha llorado su pérdida así como lo ha hecho Geraldine Larrosa (Innocense en el artisteo) que fue el gran amor de su vida. El talento de Carlos sumado a su buen ojo para los negocios ha hecho que su patrimonio póstumo sea millonario.

Casi dieciocho millones de euros se estima que sume la fortuna que Marín amasó en vida y que, gracias a los derechos de autor de su música, seguirá incrementándose tras su trágico fallecimiento.

Según recoge ‘El Español’ el patrimonio del cantante ha sido valorado por un portal norteamericano especializado en tasar los bienes patrimoniales de las personas famosas y, como era de esperar, la mayor parte del dinero de Marín proviene de la música.

Aunque él empezó en el mundo musical con ocho años, lo cierto es que la fama mundial le llegó con ‘Il Divo’, grupo formado por Simon Cowell que también se ha visto seriamente afectado por la muerte de Carlos.

El año de lanzamiento de su primer álbum fue 2004 y ya fueron numero uno en muchos países del mundo repitiendo esta hazaña en 2005, con su segundo disco grupal titulado ‘Ancora’. Sin descanso y con un éxito arrollador la formación sacó en 2006 un tercer disco que cosechó también un éxito aplastante y así, los integrantes de la formación, iban sumando ceros a su cuenta corriente.

Llevan vendidos más de 35 millones de discos a nivel mundial y es que son los creadores del pop operístico, una mezcla infalible que acerca al gran público un género tan elitista como suele ser la ópera.

Carlos Marín no solo trabajó con ‘Il Divo’ sino que también se abrió a otros negocios que le han reportado su fortuna. Marín era propietario y administrador único de la sociedad ‘Espectáculos Tercer Milenio’ que se dedica a la representación y management de otros artistas.

Dicha compañía fundada por Marín está todavía a día de hoy inscrita a nivel legal bajo su administración mientras que su hermana Rosa María es la apoderada y su exmujer Geraldine Larrosa es accionista.

Según el citado medio, el cantante también ejercía de accionista con participaciones en dos compañías más que también se dedicaban a la representaciones de personajes y eventos artísticos, era el administrador de ‘Trapp Entertainment SL’ así como socio y administrador único de ‘Opera Diamond SL’.

Durante su vida y también tras su adiós sigue estando claro que la gran pasión de Carlos Marín era el arte en todas sus formas y así lo reflejan sus inversiones económicas al margen directo de ‘Il Divo’.

El grupo le dio la fama mundial y el dinero que él, posteriormente, supo invertir en crear y participar de estas empresas que sirven para guiar y lanzar a nuevos talentos tal y como Cowell hizo con él y sus tres compañeros al unirlos en el consagrado grupo musical.