Una pareja quiere casarse, aunque para la ley son padre e hijo

Ahora que el matrimonio homosexual en Estados Unidos es legal, dos hombres que llevan 43 años en pareja desean casarse. Por desgracia, se están enfrentando a un inmenso obstáculo: desde el punto de vista legal, son padre e hijo.

Cuando Nino Esposito (a la izquierda) de 78 años, y Drew Bosee, de 68 años, decidieron formalizar su relación en 2012 buscaron una alternativa para obtener los mismos derechos legales que se les otorga a las parejas heterosexuales, como por ejemplo, el derecho de visita al hospital en caso de emergencia. En aquel momento, en su estado, el matrimonio entre personas del mismo sexo era ilegal. “Nunca pensamos que íbamos a ser testigos de la aprobación del matrimonio gay en Pensilvania”, le comentó Bosee al New York Daily News. Así que la pareja decidió recurrir a la figura legal de la adopción, una táctica que algunas parejas homosexuales utilizaron para consolidar legalmente su relación antes de que el Tribunal Supremo declarara ilegal la prohibición del matrimonio homosexual en Pensilvania, en junio de este año. “Durante 43 años, ese fue el camino legal que nos permitió estar lo más cerca posible de ser una familia ante la ley”, comentó Bosee.

Así que Esposito adoptó a Bosee y se convirtió legalmente en el padre de su pareja. “Este tipo de adopciones refleja la profunda necesidad de las personas de protegerse legalmente los unos a otros, de formar una familia. Aunque, obviamente, no es la mejor solución para intentar amparar al otro”, le comentó a Yahoo Parenting, Hayley Gorenberg, director jurídico adjunto de la organización Lambda Legal, en referencia a otro caso similar que salió a la luz a principios de año. “Vivimos en una nación fragmentada donde las personas se han sentido desesperadas por cuidar legalmente el uno del otro. Por tanto, es totalmente comprensible que hayan buscado alternativas creativas para protegerse como una familia”.

Pero ahora que el matrimonio homosexual es legal en todo el país, Bosee y Esposito quieren casarse. “Nos dimos cuenta de que podíamos tener una unión completa, que es lo que queremos”, le comentó Esposito a CNN. Para lograrlo, la pareja solo debería anular la adopción, y pensaron que no tendrían problemas.

Por desgracia, estaban equivocados. En junio, un juez de primera instancia del estado rechazó su solicitud de anulación de la adopción, alegando que dicha inversión debe ser aprobada por un tribunal superior. En su decisión, Lawrence O'Toole, el juez del condado de Allegheny, comentó que estaba “sensibilizado con la situación que estaban viviendo el Sr. Esposito y el Sr. Bosee”, y añadió que “agradecería que nuestros tribunales de apelación ofrecieran indicaciones para resolver casos paralelos”.

“Es irónico, porque cuando hicimos la adopción pensamos que íbamos un casillero por delante en el juego”, le comentó Bosee al Daily News. “Pero en lugar de ser una ayuda, se ha convertido en un obstáculo, en un impedimento para lo que ahora nos permiten hacer”.

En casos similares, los jueces han concedido la anulación de las adopciones cuando el matrimonio era la opción más apropiada. En mayo, antes del fallo de la Corte Suprema, pero después de que se declararan inconstitucionales las leyes de Pensilvania que prohíben el matrimonio entre personas del mismo sexo, otra pareja revirtió con éxito su situación legal en tanto padre e hijo y se casaron después de llevar 50 años juntos. “Cuando fuimos a la corte me temblaban las rodillas, pero al final de la audiencia nuestro abogado nos comentó: ‘Tenemos la esperanza de que la magistratura va a firmar la orden de anulación de la adopción’, y el juez dijo ‘estaría feliz de hacerlo’”, le confesó en aquel momento a Yahoo Parenting Norman MacArthur, de 74 años, que había sido adoptado por su pareja, Bill Novak, de 76 años. “Había 30 amigos nuestros en el tribunal para demostrar que este caso no era común, aunque el juez lo sabía y cuando firmó la orden, nuestros amigos comenzaron a aplaudir y me eché a llorar”.

Bosee y Esposito esperaban el mismo resultado. “Teníamos 80 dólares en efectivo en el bolsillo. Estábamos preparados para cruzar la calle y conseguir nuestra libreta. Pero el juez O'Toole, tenía otra idea en mente”, le dijo Esposito a CNN.

Gorenberg comentó que es perfectamente comprensible que una pareja homosexual estable opte por el matrimonio en vez de la adopción. “Como ahora el matrimonio igualitario es posible, es lógico que las personas deseen acceder a la figura legal que más se acerca a lo que son el uno y el otro”, dijo Gorenberg. “El matrimonio es la mejor alternativa, y si está disponible y no hay discriminación, es normal que sea la primera opción por la que se decanten”.

Bosee y Esposito han apelado al Tribunal Superior del Estado, y el lunes, Bob Casey, senador por el estado de Pensilvania, escribió una carta a Loretta Lynch, Fiscal General, pidiendo que el Departamento de Justicia intervenga. “Las parejas LGBT deben tener derecho a obtener una licencia de matrimonio, sin importar el estado en el que residen o la jurisdicción que se aplique”, escribió Casey, según fuentes de la CNN. “Para estos casos la ley ha cambiado drásticamente desde que se produjeron las primeras adopciones”. Un portavoz del Departamento de Justicia le comentó a CNN que están revisando la solicitud de Casey.

Los argumentos de la apelación de Bosee y Esposito están listos para ser presentados en diciembre, y la pareja espera que su largo camino ayude a otras personas que están atravesando una situación similar. “Esperamos que nuestra experiencia ayude a otras personas, cuando finalmente consigamos lo que queremos. Esto se tiene que acabar”, le confesó Esposito al Daily News. “Pensábamos que no viviríamos para ver lo que el Tribunal Supremo hizo este año con el matrimonio igualitario en todo el país. Ahora, nos preocupa que no vayamos a vivir lo suficiente como para ver nuestro propio matrimonio”.

Foto: Jared Wickerham/New York Daily News

Rachel Bertsche
Redactora