Optimismo Republicano ante las elecciones de noviembre pese al revuelo Trump-Putin

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, a su llegada a la Casa Blanca en Washington, jul 18, 2018. REUTERS/Joshua Roberts

Por James Oliphant

AUSTIN, Texas (Reuters) - En una conferencia en Texas esta semana, los Republicanos tenían motivos para sentirse abatidos, incluso aterrorizados, después de que el encuentro del presidente Donald Trump con el ruso Vladimir Putin provocara una gran indignación e hiciera que se volviera a hablar de un avance de los Demócratas en las elecciones legislativas de noviembre.

Por el contrario, miembros del partido expresaron optimismo sobre sus posibilidades de mantener el control del Senado y la Cámara de Representantes de Estados Unidos este otoño, diciendo que los mensajes y las luchas internas del Partido Demócrata estaban ayudando a impulsar las expectativas republicanas.

"Son su peor enemigo, y so me resulta muy cómodo", dijo Terry Lathan, presidenta del Partido Republicano de Alabama.

En entrevistas con Reuters, asistentes a la cita del Comité Nacional Republicano en Austin dijeron que la presión de los progresistas frente a la vieja guardia Demócrata tras la derrota de Hillary Clinton en las elecciones presidenciales de 2016 había obligado a muchos Demócratas a adoptar posiciones más izquierdistas.

Los Republicanos esperan explotar estas diferencias. Creen que los votantes rechazarán los llamamientos a la destitución de Trump y los gritos de "traición" después de la reunión con Putin, así como la pretensión de algunos liberales de abolir la Agencia de Inmigración y Control de Aduanas y el intento de los líderes demócratas de bloquear al candidato al Tribunal Supremo de Trump, Brett Kavanaugh.

Los Demócratas necesitan reunir un total neto de dos escaños para asumir el control del Senado y 23 representantes para hacerse con la Cámara. Arrebatar el control de una cámara les permitiría hacer descarrilar o frenar gran parte de la agenda política de Trump, además de incrementar la supervisión del Congreso sobre el Gobierno de Trump.

Los Republicanos siempre han creído más probable perder el control de la Cámara de Representantes que el del Senado, porque deben defender varios distritos residenciales moderados y de clase media donde la mayoría de los votantes desaprueba a Trump.

Sin embargo, son cada vez más optimistas sobre el mantenimiento de la mayoría de esa cámara y confían en que sumarán varios escaños en el Senado.

(Información de James Oliphant; Editado por Colleen Jenkins y Peter Cooney; Traducido por Blanca Rodríguez)