Ayatolá bareiní considera normalización con Israel una "derrota psicológica"

Manama, 13 sep (EFE).- El principal clérigo chií de Baréin, el ayatolá jeque Isa Qasem, dijo este domingo que la normalización de relaciones de los países del golfo Pérsico con Israel representa una "derrota psicológica" y apeló a la "resistencia" de los pueblos árabes frente a las decisiones tomadas por sus líderes.

"Ayer, Emiratos Árabes Unidos (EAU), hoy Baréin y mañana un tercer y cuarto país entrarán en el pantano de la normalización y su gran pecado (...) Existe una derrota psicológica que los gobiernos (árabes) están deseando imponer a sus pueblos, pero los pueblos deben resistir", dijo el ayatolá bareiní, exiliado en Irán.

En un comunicado publicado por el disuelto partido opositor chií Al Wefaq, próximo al clérigo, Qasem manifestó su rechazo al establecimiento de lazos entre su país e Israel, alegando que es "contrario a la voluntad de Dios y de los pueblos".

Asimismo, dijo que estos acuerdos auspiciados por Estados Unidos son una muestra de la "obediencia a la voluntad estadounidense e israelí", países que, en su opinión, pretenden "estrechar el cerco sobre los pueblos árabes y acabar con sus últimos alientos".

En este sentido, el influyente ayatolá hizo un llamamiento a la "resistencia de los pueblos" árabes contra los acuerdos de normalización con Israel.

El pasado día 11, Baréin se convirtió en el segundo país del golfo Pérsico en establecer lazos con Israel, después de que Emiratos ya lo hiciera el 13 de agosto, una acción inesperada que fue anunciada por el presidente estadounidense, Donald Trump.

Estos acuerdos han provocado el rechazo rotundo de los palestinos, que creen que la normalización con Israel puede afectar a sus aspiraciones de paz, así como la condena de otros grupos y partidos, sobre todo de la rama chií del islam.

Desde el fin de las guerras árabe-israelíes de 1967 y 1973, Egipto y Jordania eran los únicos países árabes que hasta ahora habían establecido relaciones con Israel, en 1979 y 1994, respectivamente.

El resto había acordado en 2002 no hacerlo hasta que Israel terminase la ocupación de los territorios de Palestina y lo reconociese como Estado con capital en Jerusalén Este.

(c) Agencia EFE