La obra pública, "prioridad" para el Gobierno después del acuerdo con los acreedores

El día después del acuerdo con tres grupos de acreedores privados por la deuda argentina, el gobierno de Alberto Fernández combinó una medida celebración del objetivo cumplido con la planificación de herramientas para comenzar a reactivar la economía, mientras sigue de cerca los números de contagios en el combate al coronavirus en el país.

"Estamos muy contentos. Esto nos permite una perspectiva distinta, pensar herramientas de política pública desde una perspectiva que sea parte de lo que nos habíamos comprometido con los argentinos y argentinas, ni más ni menos que abandonar un modelo de especulación financiera e ir hacia un modelo de producción y de empleo", afirmó el jefe de gabinete, Santiago Cafiero, antes de entrar a la reunión semanal de gabinete económico, en la que el ministro de Economía, Martín Guzmán, fue recibido por sus pares con una ovación.

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Reactivar las "áreas ociosas de las industrias" y el inicio o finalización de obras demandadas por las provincias están al tope de los objetivos del Gobierno para esta nueva etapa, señalaban fuentes oficiales, aunque los datos finos sobre el paquete de 60 medidas preanunciado por el propio Presidente para la pospandemia quedaban guardados bajo siete llaves.

"Voy a dar un respuesta antipática: esas medidas las va a anunciar el Presidente", dijo Cafiero a la prensa acreditada en Casa Rosada antes de ingresar en la reunión. "Se está esperando el mejor momento para anunciar las medidas, el grueso de ellas está definido", agregaron cerca del Presidente, atento a que la actual "meseta" en la cantidad de contagios no se dispare en los próximos días.

"La obra pública es prioridad, claro", afirmaban ayer cerca del Presidente, sin establecer plazos ni fechas para los anuncios. Desde la Casa Rosada reiteraron que tendrán como parámetros las propuestas que cada uno de los gobernadores acercó a Guzmán y sus pares Eduardo de Pedro (Interior) y Matías Kulfas (Producción), en reuniones virtuales que comenzaron hace poco menos de dos semanas y culminaron el lunes con el bonaerense Axel Kicillof, con el objetivo de diseñar un plan federal de obras.

"Se escuchó a todas las gobernadoras y los gobernadores para avanzar juntos en un programa que impulse el potencial regional que genere condiciones para un desarrollo sustentable e inclusivo", dijo Guzmán al término de la reunión con Kicillof, aunque desde las provincias gobernadas por la oposición siguen las dudas sobre la "equidad" con la que se distribuyen y distribuirán obras y fondos desde Balcarce 50 y el Ministerio de Economía.

"Queremos que no quede ningún proyecto productivo razonable e innovador de las provincias sin financiamiento y para eso desplegaremos todas las herramientas a nuestro alcance", agregó Kulfas, en un intento por acallar las voces críticas que surgieron semanas atrás desde representantes opositores de Mendoza y Corrientes, ambas gobernadas por la UCR, en relación al reparto de los $120.000 millones que manejan Interior y Economía destinados a combatir la pandemia en el país.

Desde el Gobierno reiteraron que el Presidente habló en repetidas ocasiones de "regionalizar" el país para que las medidas sean más efectivas y abarcativas. Y que a las regiones Centro, Cuyo, Noroeste, Noreste y Patagonia, se sume el área metropolitana como una entidad uniforme.

En el mediodía del jueves, desde la quinta de Olivos y junto al ministro de Obra Pública, Gabriel Katopodis, el Presidente compartirá una teleconferencia con cinco gobernadores (y anunciará allí el reinicio de obras paralizadas en la gestión anterior y nuevos emprendimientos. Buenos Aires, Entre Ríos, Corrientes, San Juan y Santa Cruz son las provincias elegidas para participar del encuentro, que en el Gobierno describen como "botón de muestra" y "casos testigo" de obras que -aseguran- llegarán a todas las provincias.

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¿Y la construcción privada? Mientras desde el Gobierno no niegan que se esté pensando en "algún mecanismo" para incentivar la inversión en el rubro vía blanqueo de divisas, fuentes del sector piden "no solo medidas de fomento a la oferta sino que también, y muy especialmente, a la demanda", como financiamiento a través de bancos estatales y de la Anses para facilitar el acceso a la vivienda de sectores de ingresos medios, con menos impuestos.