Obama y Hollande piden a Rusia que concentre ataques en Siria contra Estado Islámico

Por Roberta Rampton y John Irish WASHINGTON (Reuters) - El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y el mandatario de Francia, Francois Hollande, presionaron el martes a Moscú para que concentre sus ataques en Siria contra los milicianos de Estado Islámico, después de que Turquía elevó las tensiones en la región al derribar un avión ruso. Obama y Hollande también instaron a Moscú y Ankara a no permitir que la situación escale después de que Turquía, un aliado de la OTAN, derribara un avión de guerra ruso cerca de su frontera con Siria tras violar reiteradamente su espacio aéreo. El presidente de Estados Unidos dijo que su país aún no tiene suficiente información para sacar conclusiones sobre el incidente, pero agregó que enfrentamientos similares podrían evitarse si Rusia dejara de atacar a rebeldes siros "moderados" que combaten a las fuerzas leales al Gobierno del presidente Bashar al-Assad. "Esto apunta a un problema actual con las operaciones rusas, en el sentido de que se están realizando muy cerca de la frontera turca y persiguen a opositores moderados que no sólo son apoyados por Turquía, sino por una amplia variedad de países", dijo Obama. Si Rusia dirige su energía contra las fuerzas del Estado Islámico, "es menos probable que ocurran algunos de esos conflictos o potenciales errores o escaladas", dijo Obama. Rusia apoya al Gobierno de Assad. Los países occidentales insisten en que Assad debe dejar el poder para lograr una paz duradera en Siria. Un funcionario de Estados Unidos, quien habló bajo condición de anonimato, dijo a Reuters que su país cree que el avión ruso fue derribado dentro del espacio aéreo sirio después de una breve incursión en el espacio aéreo turco. La evaluación se basó en el calor observado del jet, dijo el funcionario. Rusia condenó la acción de Turquía, prometiendo graves consecuencias. Obama y Hollande hablaron en una conferencia de prensa en la Casa Blanca, en el marco de una visita del presidente francés a Washington para coordinar una campaña militar contra Estado Islámico tras los ataques del 13 de noviembre en París en los que murieron 130 personas.