La noche del Metro Olivos y "El Güero" Palma, las fotos de la semana

CIUDAD DE MÉXICO, mayo 9 (EL UNIVERSAL).- La Ciudad de México vivió uno de sus capítulos más trágicos en su historia contemporánea: la caída de un tramo de la Línea 12 del Metro que provocó, hasta el momento, 26 muertos y 86 lesionados, 12 de ellos, según el más reciente reporte médico, están graves. La noche del 3 de mayo quedará tatuada en la memoria colectiva de la ciudad.

Además, en la última semana Héctor "El Güero" Palma, cofundador del Cártel de Sinaloa, fue reaprehendido al salir del penal de máxima seguridad El Altiplano, en el Estado de México tras ser absuelto de la acusación por delincuencia organizada.

Y, en medio de sucesos de trascendencia nacional, las imágenes del proceso de vacunación continúan en todo el país. Estas son las fotos de la semana contadas a través de la mirada de sus autores.

Ciclistas sobre Paseo de la Reforma, de Berenice Fregoso. 2 de mayo

El ciclotón en Paseo de la Reforma recobró su vida hace unos días. Ahora, como antes, puedes ver a los ciclistas, runners y patinadores. Lo que hicimos fue documentar una de las actividades emblemáticas de la Ciudad de México. Antes de que las autoridades capitalinas dieran luz verde para su reactivación, en las últimas semanas ya era muy notorio observar a las personas apropiarse de la avenida, veías a muchos ciclistas. De modo que al hacer oficial su uso dominical me parece que la cantidad de personas creció considerablemente. La imagen es una muestra de cómo la gente ha regresado en familia, en grupos de amigos, con sus perros, en pareja. Es una fotografía colectiva de una actividad que para muchos capitalinos es vital.

Sequía afecta al Estado de México, de Jorge Alvarado. 3 de mayo

La presa Villa Victoria ha registrado niveles muy bajos de agua debido a la falta de lluvias. Se trata de una de las presas más importantes de la región porque alimenta el sistema Cutzamala. Según un informe, 36 municipios del Estado de México están en crisis por este problema. En la foto están dos niños, platiqué con ellos y me dijeron que la presa tenía poca agua. Es tan grande que, a simple vista, no puedes dimensionar los bajos niveles, pero los niños la conocen bien, toda la población de Villa Victoria acude ahí para lavar su ropa. Es contradictorio que este municipio, con la presa ahí, no tienen agua potable en sus casas, así que es común ver a la gente con bidones para abastecerse directamente de la presa.

Un pandémico Día de la Santa Cruz, de Jorge Alvarado. 3 de mayo

En el Estado de México, particularmente en Toluca, el Día de la Santa Cruz es muy significativo. Es el día en que los trabajadores de la construcción van a la iglesia para que sus cruces sean bendecidas y luego colocadas en las obras para que los protejan de accidentes durante su trabajo; pero la fecha no es sólo importante para ellos, lo es también para toda la población. Con la pandemia las cosas fueron muy distintas a otros años, el sacerdote hizo las cosas muy rápidas, la gente se dividió por bloques e iban saliendo poco a poco. No había grupos grandes de personas, es más, muchos iban solos. Calculo que en ese momento habría unas cien personas, pero la Catedral es inmensa.

La noche más larga y trágica en la Ciudad de México, de Diego Simón Sánchez. 3 de mayo

Esa noche me llamaron para pedirme que fuera lo más rápido posible al Metro Olivos. El taxi sólo pudo acercarme a Periférico, me bajé y empecé a caminar, aún me faltaban unos 3 kilómetros, quería pedir ayuda a motociclistas porque tenía la desesperación de llegar lo más rápido posible, pero todos iban ocupados con dos personas. Finalmente, un ciclista me acercó un poco más. Había ríos de gente tratando de llegar a sus casas. Cuando llegué la Guardia Nacional todavía no acordonaba toda la zona y había bomberos, policías, protección civil, ambulancias, vecinos, curiosos, éramos muchísimos, había un caos total. Mi objetivo era estar lo más cerca posible y cuando lo logré tomé esta fotografía. Tan sólo unos minutos después la Guardia Nacional empezó a desalojar el área, nos empezaron a sacar a todos. Hubo varios empujones entre colegas y policías. Fue una noche muy larga. Después de la medianoche ya el área cero estaba despejada porque comenzaron a sacar los cuerpos. El ambiente era muy tenso e incierto porque no sabíamos cuántas personas habían fallecido, cuántos aún podían estar vivos y qué más podía pasar en un momento tan inimaginable como la caída del Metro. Muy cerca de ahí está el Hospital Belisario Domínguez y también fui, me encontré con familias buscando a sus seres queridos. Una noche muy dura.

La muerte y los olivos, de Valente Rosas. 3 de mayo

Llego a mi casa y me avisan lo ocurrido, entré a Twitter y vi el colapso. Me subí de nuevo a la moto, me encomendé a Dios y me fui hecho la madre por todo el periférico. Tenía que recorrer 62 kilómetros hasta la zona cero, llegué en 25 minutos y durante ese tiempo me imaginé mil cosas, estaba muy angustiado porque estaba muy lejos, hice lo imposible para llegar. Muy cerca del área tuve la misma sensación que el temblor de 2017 porque había gente corriendo, ambulancias por todos lados, policías, bomberos. En Tezonco ya no pude pasar porque la Guardia Nacional ya había cerrado los accesos, dejé mi moto y comencé a correr. Una vez ahí vi el mismo caos, muchas personas. Me subí a una jardinera y empecé a generar las imágenes, pero enviarlas fue otro caos porque las redes estaban colapsadas, yo sabía que estaban esperando material en el periódico, fueron momentos de gran tensión. Diego, mi compañero, estaba del otro lado, así que terminamos por hacer un trabajo en equipo con ángulos diferentes. Yo me quedé toda la noche y por varias horas pensamos que ya habían retirado todos los cuerpos. Alrededor de las cuatro mañana llegó más personal del Servicio Médico Forense, eso fue la señal de que había más cuerpos. Con una grúa de gran alcance lograron levantar una parte del vagón y así pudieron sacar tres cuerpos más. Uno de ellos es el que está en la fotografía. En ese momento todavía faltaba un cuerpo más que estaba dentro de un automóvil. Fue un momento muy triste para todos.

Un corazón para una segunda oportunidad, de Armando Martínez. 3 de mayo

Me tocó cubrir la fuente policiaca. Nos informaron que una aeronave de la Policía Capitalina realizaría el trasladado, desde el aeropuerto de la Ciudad de México, de un corazón y de un equipo médico procedente de Guadalajara. La aeronave aterrizó en Eje 3 Baja California y Cuauhtémoc, Justo frente al Centro Médico Siglo XXI, para finalmente ser llevado por tierra al Hospital Federico Gómez. Llegué a la zona y casi de inmediato aterrizó el helicóptero. El último que descendió es el médico que traía el órgano. Un aterrizaje así no es tan inusual, a veces trasladan heridos, enfermos. Lo que me impresiona es cómo los curiosos pueden ser muy irresponsables y hacen lo posible para acercarse a las aeronaves, no saben que sus acciones podrían ocasionar accidentes.

Vacunación para los de 50 a 59 años de edad, de Jacob García. 3 de mayo

La vacunación para personas de 50 a 59 años de edad ya inició en el estado de Chiapas. La imagen fue tomada en el Centro Recreativo Caña Hueca, es un lugar en donde la gente puede hacer deporte. Las personas ya habían sido vacunadas y estaban en el tiempo de espera para verificar que no tuvieran una reacción alérgica inmediata. A diferencia del proceso de vacunación para los adultos mayores de 60 años, hubo una organización muy notoria. Ya no se vierOn las largas filas que se hacían horas antes, incluso me tocó ver que las personas llegaban una tarde antes porque pensaban que debían apartar su lugar o se quedaban sin vacuna. Ahora la gente llega en el horario que le corresponde y todo sucede con gran fluidez. Ese día había poca gente y esperamos que se debe a la mejoría en la organización y no a que las personas no están acudiendo a vacunarse.

Reaprehenden al "Güero" Palma en el Altiplano, de Jorge Alvarado. 4 de mayo

Ese día tuve un montón de trabajo, estaba enviando mi material al periódico cuando me avisaron que "El Güero" Palma iba a salir del Penal de Máxima Seguridad del Altiplano. Así que me lancé de inmediato, cuando llegué había un montón de gente de la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada, de la Fiscalía General de la República y de la Guardia Nacional. Todo ese personal era evidencia clara de que efectivamente Héctor Salazar iba a ser liberado o reaprehendido. Para ese momento ya había colegas de otros medios y todos estábamos a la espera, así pasaron varias horas. Hacia las dos de la mañana vimos las camionetas salir de dentro del Penal. La imagen es justo de cuando Salazar hace el registro de su salida, se da la vuelta, lo liberan y le notifican que tenía una orden de reaprehensión. Él y otras personas empezaron a gritar, no pudimos escuchar porque no estábamos tan cerca del lugar y con el cubrebocas las voces no eran tan claras, pero sí era claro que había una discusión. Poco después lo volvieron a meter a una camioneta con rumbo a la Ciudad de México.

Retiro del vagón del Metro, de Germán Espinosa. 4 de mayo

El martes en la mañana, el día después de la caída del Metro, fui a la zona cero para dar seguimiento a la cobertura. A diferencia de mis compañeros, para mí ya no fue tan complejo llegar al lugar. La imagen corresponde al momento en que retiran el primer vagón, lo que se ve es que se lo están llevando. Previo al retiro pasaron varias horas y muchas maniobras del personal, fue muy complejo el proceso, tenían que asegurar bien el vagón y hacer procedimientos con las grúas. En la fotografía se pueden ver a las personas que se acercaron para ver cómo había quedado el vagón, había muchos curiosos grabando el momento en el que se llevaron el tren. Escuché incluso a personas narrar a niños que ese era el vagón que se había caído.

El largo camino a casa, de Diego Simón Sánchez. 5 de mayo

La imagen se tomó dos días después de la caída del metro. Fui para documentar cómo iban las labores de peritaje y levante, y para ver cómo estaban las cosas con el transporte público. El Gobierno de la Ciudad de México dispuso de varios camiones, entre ellos los turibuses de dos pisos para trasladar a la gente por la ruta de la Línea Dorada. Algunos camiones llegaban a Mixcoac, otros a Atlalilco y otros más a Taxqueña. Fui con mi compañero reportero y los testimonios eran sobre cómo las personas nos explicaban que iban a duplicar sus traslados por más de dos horas, es decir, si antes hacían dos horas, ahora iban a ser hasta cuatro para ir a sus trabajos y otras cuatro para volver a sus casas.