Nadia, la alumna de ‘La Academia’ que cambió de carrera gracias a su voz

Era de las más queridas en la primera generación de ‘La Academia’ y parecía que se convertiría en una nueva Aída Cuevas, pero algo sucedió en el camino y Nadia simplemente no avanzó. Ahora, hace el esfuerzo como cantante invitada en el show de Los Dandys, con quienes se presentará este domingo en el Teatro Metropolitan.

Tras una difícil pero constante carrera musical, optó por dedicarse a la radio. De hecho, esta semana recibió un reconocimiento por su programa en ABC, titulado ‘Nadia música, el idioma del amor’. Se trató del Premio Águila, un reconocimiento a la excelencia en los medios de comunicación con mensaje cristiano.

El éxito repentino y los problemas

El ascenso a la fama no ha sido algo fácil para la intérprete nacida en Oaxaca. Sí, ha lanzado nueve álbumes de estudio, tiene varios discos de oro y platino, además de premios como la Musa de Plata del Auditorio Nacional. De hecho, es la única artista de ‘La Academia’ en contar con una nominación al Grammy estadounidense, por su álbum ranchero ‘A puro dolor’.

Y es que la vida cambió por completo para ella y todos los participantes de la famosa primera generación de ‘La Academia’, un reality de talento vocal lanzado por TV Azteca en el año 2002; y que lanzó al estrellato de la música y la conducción a figuras como Yahir, Myriam, Víctor García, Raúl Sandoval, Estrella, Laura Caro, Toñita y María Inés, entre otros.

Pero a mitad del reality, y en plena competencia, Nadia comenzó a presentar problemas de salud en la garganta, lo cual se reflejó en varias de sus presentaciones.

Su llegada al cristianismo

Luego de ocho meses de programa, Nadia logró llegar a la final de ‘La Academia’, donde obtuvo el quinto lugar. Y al terminar el programa, lo que le siguió fue una gira por todo México, Estados Unidos y Centroamérica.

La gira les estaba trayendo fama, pero lo que ella necesitaba era descansar la voz. “Estando enferma, tenía que salir a cantar, viajar y hacer los conciertos. Ya no queríamos fama. Lo que queríamos era que Nadia tuviera aunque fuera un mes de descanso para poder curarle el problema que tenía en la garganta”, relató su padre, Mario López.

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Y sobre lo que vivieron junto a su hija durante esa etapa, agregó: “Es una vorágine de cosas, de ofrecimientos, de tentaciones, de alcohol, de drogas”. Para entonces, Nadia quería independizarse de sus padres pues, le dijeron, eso le daba credibilidad en la industria.

Pero sus padres insistieron y permanecieron, algo que a ella no le gustaba tanto. “Lo das todo por estar en el escenario. Pasas incluso por encima de ti y de las personas que amas, y no te das cuenta de que en realidad estás viviendo encarcelado en esa trampa”, relató la joven, y remató asegurando: “Si Dios no hubiera estado ahí, yo me hubiera vuelto drogadicta o alcohólica”.

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Fue entonces que la familia completa decidió convertirse al cristianismo, de la mano de famosos como María del Sol y Fermín Caballero (ex vocalista de Control Machete). Desde entonces, su carrera musical continuó, pero a un ritmo mucho más pausado y probando otras facetas, como conductora del programa ‘Vive más’ y algunas presentaciones musicales eventuales.

De hecho ella, junto con Yahir, no quisieron estar en el último y fallido reencuentro de la primera generación de 'La Academia’, y ha preferido hacer colaboraciones eventuales en la música, como lo que hará justamente con Los Dandy’s en el Metropolitan.

¿La razón de no estar en este reencuentro? La propia Nadia lo explicó: “Había un muy buen trato en cuanto a dinero y a mis compañeros también los quiero mucho. Pero la verdad, cada vez que lo pensaba me daba una angustia horrible. Durante ‘La Academia’ hubo cosas padrísimas como los fans, los conciertos y la convivencia entre nosotros, pero de solo pensarlo no me daba paz”.

Nadia fue de las grandes promesas de ‘La Academia’. Con la plataforma de una televisora nacional, se dio a conocer de manera repentina, a lo que le siguió una vorágine de seguidores, conciertos, discos y el consecuente desgaste físico y emocional. Y luego de admitir que tocó fondo, encontró el equilibrio en la religión.

Con un trabajo estable como locutora y alejada de las giras y presentaciones constantes, ahora pareciera que canta más por gusto que por obligación. Su sueño de cantar sigue ahí, pero tal vez va por él a su propio ritmo.

@braham_MV