Yahoo Noticias Gonzalo Larrañaga: el motociclista mexicano que cruza América en busca de un récord Guinness
Gonzalo Larrañaga tuvo su primera moto a los 14 años de edad. En su casa, como en la de muchos, estaban prohibidas las motocicletas. “No nos daban moto por la peligrosidad. Nadie quiere su hijo se lastime”, recuerda. Sus primeras experiencias fueron con vehículos prestados, de amigos quienes se arriesgaron a que probara suerte con ellas. Hoy, casi 40 años después de la primera vez que se subió a una, busca establecer un nuevo récord Guinness al cruzar 23 mil kilómetros de toda América conduciendo una moto durante 33 días.
Su tiempo máximo en el trayecto se lo marca las ganas de superar al actual récord en un recorrido similar, que los británicos Kevin y Julia Sanders lograron completar en 35 días en agosto de 2003. “El sueño de cualquier motociclista, de cualquier parte del mundo, es recorrer todo el territorio americano de punta a punta. Cuando comencé a hacer mis planes, mis cálculos, pensé que podía hacerlo en menos tiempo, y 33 es mi número favorito”, cuenta Gonzalo a Yahoo Noticias.
Nacido en Ciudad de México, pero con casi 30 años viviendo en Quintana Roo (Playa del Carmen), Gonzalo es asiduo de las pistas de carreras. “Me voy a divertir mucho, voy concentrado en disfrutar el viaje, pero sin parar. Seguimos la filosofía del motociclista, viajamos como pordioseros, pero llegamos felices, con una sonrisota de todo el viaje. De haber sentido los olores de todo el recorrido”. El plan de recorrer América se le había frustrado repetidamente en los últimos dos años, pues la pandemia por la Covid lo obligaron a retrasarlo.
Pasaporte sellado
La ruta comenzará en Ushuaia (Argentina) subiendo por Chile, Ecuador, Perú, Colombia, Panamá, Costa Rica, Nicaragua, El Salvador, Guatemala, México, Estados Unidos y Canadá. Terminarán en Alaska, a temperaturas de -16º. “Decidimos construir el recorrido así, comenzando por la zona sur, para buscar un punto medio en los climas”, cuenta Gonzalo, quien explica que un patrocinante les facilitó un traje especial para aguantar los cambios de temperatura.
Hay dos retos muy importantes en su camino: el desierto de Atacama (Chile), donde no hay sitios para recargar combustible; y el Tapón de Darién, la selva que divide a Colombia y Panamá. “Allí hay que pasar en barco o avión. Pero el avión sale desde Bogotá, y tendría que subir igual hasta Barranquilla, porque si no pierdo el derecho al récord. Lo más probable es que nos toque subir hasta la costa, para marcar el recorrido y regresar, si no conseguimos un barco que nos traslade”.
Gonzalo tendrá que comprobar a las autoridades del Récord Guinness, pasaporte en mano, que cumplió con los días pautado de recorrido. Ese, reconoce, es uno de los principales obstáculos. Aunque acelere en la carretera, las alcabalas de migración pueden ser más lentas de lo que espera: “No sé cuánto tiempo me lleve a cruzar Centroamérica, donde hay una problemática importante en las fronteras. Es un poco burocrático”, ha investigado. Mucho más ahora que, como exigencia por la crisis sanitaria, tendrá que practicarse una prueba de Covid antes de ingresar a cada país.
La bandera mexicana está presente en todo el recorrido. “Estamos orgullosos de nuestro país y nuestro continente”, dice Gonzalo. La frontera mexicana espera alcanzarla en el día 13 de recorrido. Desde ahora, sin embargo, los días son muy inciertos. Para el 14 de abril esperaba estar camino a Córdoba, Argentina, para acercarse al inicio de su recorrido. El retraso en la llegada de su moto al país sureño le impidió iniciar según su plan: “La moto la mandamos por avión, por la premura. Viaja sin líquidos y, una vez que llegue, hay que activarla de nuevo”.
Su plan es manejar de día, pues de noche sabe que aumenta mucho los índices de accidentes en las carreteras. Dormirá en hoteles, no importa que sea de pasos. “El cuerpo tiene que descansar, va sufriendo todo el camino”.
Video andando
Gonzalo no viajará solo. Lo acompañará Luis Arango, un documentalista que pretende dejar registro de todo el recorrido. Le tocará viajar de pasajero en una segunda moto para, con la cámara en mano, grabar y aguantar la velocidad del motociclista
“Es un poco complicado. No vienes con un equipo de producción como tal. Sin embargo, es una súper aventura”, explica Arango, para quien será su segundo documental. El primero, cuenta, lo publicó en 2008 con testimonios del terremoto de Ciudad de México. “No me había subido en una moto en un viaje tan largo. Esto es un poco de corazón y confianza. Queremos lograr esta hazaña”, dice.
Todavía no está claro cómo será difundido este documental, pero sí la premisa: “Queremos hablar de cómo nos vemos en América. Como ve la gente del Norte a la gente del Sur. También queremos romper el estereotipo, todos somos americanos”, cuenta Arango. De este proyecto audiovisual –que se llama Visitante Local– podría salir una serie más ambiciosa, una franquicia que los lleve en moto por África, Europa y otros senderos.
