Montenegro elige presidente dividida entre la vía europeísta o el acercamiento a Rusia
Belgrado/Podgorica, 17 mar (EFE).- Montenegro celebra este domingo en mitad de una grave crisis política unas elecciones presidenciales que pueden definir durante años hasta qué punto el país, miembro de la OTAN y aspirante a entrar en la UE, mantendrá ese rumbo euroatlántico, o si se inicia algún tipo de acercamiento a Rusia.
Los comicios se celebran justo cuando el presidente del país, Milo Djukanovic, acaba de disolver el Parlamento para celebrar elecciones anticipadas, previsiblemente en mayo o junio, tras fracasar el intento de formar un nuevo Gobierno, tras la caída del actual el pasado agosto.
La inestabilidad política en Montenegro ha provocado la caída de dos Gobiernos desde 2020, cuando el Partido Democrático de los Socialistas (DPS), de Djukanovic, perdió el poder por primera vez después de tres décadas.
Djukanovic, seis veces primer ministro y presidente en dos mandatos, aspira a renovar el cargo como candidato del DPS, heredero del partido comunista y que en los últimos años ha liderado el rumbo del país hacia la entrada en la OTAN, que se produjo en 2017, y la candidatura de acceso a la Unión Europea.
Sus principales contrincantes son tres políticos de la heterogénea coalición de europeístas y prorrusos que en 2020 mandó al DPS a la oposición, pero que debido a sus diferencias internas no ha podido consolidarse en el poder.
Andrija Mandic es el aspirante del proserbio y prorruso Frente Democrático (DF), y junto a Djukanovic protagoniza la fuerte polarización en la sociedad montenegrina entre mantener el rumbo europeísta o virar hacia la tradicional buena relación con Belgrado y Moscú.
En total, siete candidatos, entre ellos solo una mujer, compiten por los votos de 540.000 electores por un mandato de cinco años en las cuartas presidenciales desde que Montenegro se independizó en 2006, cuando rompió la federación que mantenía con Serbia desde la desintegración de Yugoslavia.
Pese a la falta de sondeos, se espera que ninguno logre la mayoría absoluta este domingo y sea necesaria una segunda vuelta, el 2 de abril, entre los dos candidatos más votados.
Loa analistas dan por seguro que Djukanovic estará en esa ronda. Allí se enfrentará, probablemente, o al prorruso Mandic, o a uno de los candidatos de posturas europeístas, Aleksa Becic o Jakov Milatovic, este último una figura en ascenso en la política montenegrina.
PRUEBA DEL PODER
Los analistas ven estas presidenciales como un test sobre la fortaleza de los diferentes partidos de cara a las elecciones legislativas anticipadas.
Una victoria de Djukanovic, acusado por los críticos de autocracia pero que ha trazado la vía euroatlántica del país, sería un gran impulso para un DPS en descenso y cargado de escándalos de corrupción tras tres décadas en el poder.
Si triunfa Mandic, se crearía cierta incertidumbre sobre el curso de la política exterior de Montenegro, alineada hasta ahora con la Unión Europea y con las sanciones a Rusia por su agresión a Ucrania.
"La definición de la escena política no sería para un período de un año o dos, sino posiblemente para más de una década. Las presidenciales mostrarán dónde está el poder sustancial", declara a EFE el analista político Srdjan Peric.
"Son un tipo de 'ejercicio de demostración' para las parlamentarias. Y serán un aporte fuerte al rumbo que Montenegro seguirá tanto a nivel interno como en política exterior", indica.
Djukanovic, de 61 años, ha dicho que su vitoria es "imperativa" para que Montenegro acelere su entrada en la UE.
Mandic, de 58, y calificado por sus críticos como exponente de la influencia serbia en el país y de las políticas prorrusas, participó en 2017 en violentas protestas contra la entrada de Montenegro en la OTAN.
En esta campaña ha cambiado su habitual acalorada retórica por un tono más conciliador que atraiga a nuevos votantes y le cree un perfil aceptable para la UE y la OTAN.
Becic, de 35 años, expresidente del Parlamento, y Milatovic, de 37, exministro de Economía, promueven los dos un discurso moderado y conciliador.
De hecho, el analista Peric explica que comparten el mismo electorado y que su fracaso al acordar un candidato único podría favorecer a Mandic en la primera vuelta.
Si uno de ellos pasa a la segunda vuelta, tendría más opciones ante Djukanovic de las que tendría el prorruso Mandic.
Snezana Stanojevic
(c) Agencia EFE