En el ministerio de Larroque se replica la convivencia tirante entre La Cámpora y el Evita

Andrés Larroque, ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense
Andrés Larroque, ministro de Desarrollo de la Comunidad bonaerense - Créditos: @La Cámpora

Con un universo de programas de asistencia más concentrado en municipios e instituciones que en movimientos sociales, en el Ministerio de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, que conduce Andrés Larroque, se replica la dinámica tensa entre La Cámpora y el Movimiento Evita , un vínculo conflictivo que se resintió más tras las críticas de la vicepresidenta Cristina Kirchner a la organización que tiene como referentes a Emilio Pérsico y Fernando “Chino” Navarro. Larroque considera “un buen compañero” a Federico Ugo, su subsecretario de Economía Popular, perteneciente al Evita, y diferencia a la militancia de ese espacio de su líder, Pérsico, al que cuestiona. Pero esa diferenciación no cae bien en el otro bando. La coyuntura de la interna afecta y complica la gestión diaria, sostienen en el campamento “evitista”.

“Yo tengo un subsecretario del Movimiento Evita en el ministerio. Es un buen compañero, Federico Ugo. Desde el primer día, yo le dije con claridad lo que pensaba y él también. Y, en esto, quiero separar de Pérsico al grueso de la militancia”, indicó Larroque el jueves, en declaraciones a El Destape Radio, cuando se refirió a la dinámica política entre La Cámpora y el Movimiento Evita en su ministerio.

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La definición que ofreció el secretario general de La Cámpora encierra un contrapunto. Aunque desde ambas orillas afirmaron que prima el respeto, las diferencias se hacen sentir. “Nuestra postura es que somos lo mismo que Pérsico” , señalaron a LA NACION cerca de Ugo, exfuncionario municipal en el distrito de Tigre.

La coyuntura y la tensión por arriba repercuten en el día a día de la gestión. La subsecretaría tiene mucho trabajo territorial, pero los recursos de la gestión son pocos. Los planes Potenciar Trabajo que acordó la Provincia no están en el área”, definieron las mismas fuentes.

En el universo de programas sociales que maneja el Ministerio de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, los movimientos sociales tienen menor injerencia que a nivel nacional. Entre otros, la cartera que conduce Larroque cuenta con planes que articula con instituciones y municipios, como Envión (talleres para jóvenes, a los que se les paga una beca de $5000), Más Vida (dirigido a mujeres embarazadas y niños de hasta 6 años, en situación de vulnerabilidad y que no reciben la Tarjeta Alimentar, con pagos de $3200 para jefas de familia con un hijo y de $1328 más como complemento por hijo), o el Programa de Fortalecimiento Alimentario a Espacios Comunitarios (una tarjeta para compra de alimentos frescos y gastos de cocina, en la que se depositan mensualmente $16.000).

La subsecretaría que conduce Ugo dentro del ministerio de Larroque tiene cinco direcciones. Según pudo saber LA NACION de fuentes ministeriales, una sola de esas direcciones responde al dirigente del Movimiento Evita. “El resto es de La Cámpora y con ellos no se coordina”, explicaron fuentes que conocen la dinámica interna, que aclararon que Larroque respeta al funcionario y que desde la subsecretaría no le juegan en contra al ministro.

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“Los planes son de tramo corto y no son tan masivos [como a nivel nacional]. Se articula más con otros actores [que con los movimientos sociales]”, señalaron desde la subsecretaría en manos del Evita. Destacaron que, igualmente, se vinculan con distintos movimientos sociales. “Desde la CNCT [Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo] hasta el Frente Darío Santillán, pasando por [Juan] Grabois. En eso, no hay condicionamientos ni del Cuervo ni de Pérsico”, argumentaron. Y ejemplificaron con trabajos como “la compra por parte del Estado de 10.000 kits sanitarios confeccionados por cooperativas textiles, abaratando así el costo, o las tareas de pintura en 1500 escuelas hechas por 20.000 trabajadores del Potenciar Trabajo”.