Yahoo Noticias Millie Bobby Brown habla de la "repugnante" sexualización que vivió en Hollywood: "puede ser apabullante"
POR David Artavia-. Millie Bobby Brown, que solo tenía 12 años cuando fue elegida para trabajar en Stranger Things de Netflix, se ha sincerado en el pódcast The Guilty Feminist sobre las dificultades de crecer siendo el centro de atención y sobre cómo al cumplir los 18 años puso las cosas en perspectiva.
"Me enfrento al mismo tipo de cosas a las que se enfrenta cualquier chica de 18 años: transitar hacia la edad adulta, tener relaciones, amistades, y todo eso", dijo. "Ser querida e intentar encajar, es mucho, y mientras tanto, estás intentando conocerte a ti misma. La única diferencia es que obviamente lo hago a la vista del público".
"Puede ser apabullante", dijo Brown sobre el hecho de tener que lidiar con la sexualización además de las luchas diarias propias de una adolescente. "Claramente he tenido que enfrentarme más a eso en las últimas dos semanas después de cumplir los 18. Veo una clara diferencia entre la forma de actuar de la gente y la forma de reaccionar de la prensa y las redes sociales ante mi entrada a la mayoría de edad".
“Es repugnante”, siguió, mientras explicaba que su experiencia en Hollywood “representa bien lo que pasa en el mundo y cómo las chicas jóvenes son sexualizadas. He tenido que lidiar con eso, pero llevo haciéndolo desde siempre".
De hecho, cuando Brown tenía 16 años, compartió un potente mensaje que abordaba las críticas y la sexualización a la que tuvo que enfrentarse al crecer con el foco mediático centrado en ella. "Los 16 parecía que tardaban mucho en llegar. Siento que el cambio se debe dar no solo en esta generación sino también en la siguiente. Nuestro mundo necesita amabilidad y apoyo para que los niños crezcamos y tengamos éxito", dijo.
“Hay momentos en los que me frustro por las imprecisiones, por los comentarios inapropiados, por la sexualización y por los insultos innecesarios que, en última instancia, se han traducido en dolor e inseguridad para mí", escribió en un post de Instagram en el que celebraba su 16º cumpleaños en 2020. "Pero nunca seré derrotada. Seguiré haciendo lo que amo y difundiendo el mensaje para generar cambios".
Sí, chicas, 16
Los 16 parecía que tardaban mucho en llegar. Siento que el cambio se debe dar no solo en esta generación sino también en la siguiente. Nuestro mundo necesita amabilidad y apoyo para que los niños crezcamos y tengamos éxito. Los últimos años no han sido fáciles, lo admito. Hay momentos en los que me frustro por las imprecisiones, por los comentarios inapropiados, por la sexualización y por los insultos innecesarios que, en última instancia, se han traducido en dolor e inseguridad para mí. Pero nunca seré derrotada. Seguiré haciendo lo que amo y difundiendo el mensaje para generar cambios.
Concentrémonos en lo que se necesita cambiar y espero que este vídeo les informe de las cosas que pasan detrás de la escena y de las luces.
No se preocupen, siempre encontraré la manera de sonreír;) Vamos 16.
Brown explicó en The Guilty Feminist que, cuando era joven, se enfrentó constantemente a críticas por expresarse con demasiada madurez en la alfombra roja.
"Una vez me dirigía a la alfombra roja y pensé: ‘Oh, Dios mío. Voy a hacerlo un poco más corto, solo un poco más corto'", explicaba de su vestido. "Tenía 16 años y era como decir: ‘Mamá, papá, por favor. ¿Puedo ponerme esto para esta entrega de premios?’”
Poco después, recordó, la prensa la persiguió por mostrar demasiado.
“Fui crucificada”, recordó, mientras añadía que los medios la acusaron de querer parecer más grande. “Me pregunté si realmente era eso de lo que debíamos estar hablando. Debíamos estar hablando de la gente increíble que había en la entrega de premios, del talento que había allí, de la gente a la que representamos”.
En los últimos años, Brown ha tomado cartas en el asunto al usar su plataforma de redes sociales para generar un cambio.
“Pienso que las redes sociales son el peor lugar de la historia”, explicó Brown, embajadora de buena voluntad de UNICEF. “Pienso que cuando la gente entra en mi página puede estar feliz. Y puede ver gente a la que se ayuda, puede aprender o puede reírse. Y están viendo a una chica de verdad. Por supuesto, me gusta publicar mis selfis, pero luego me vuelvo real”.
“Ya no publico nada personal. No vas a ver esa parte de mí. Verás las cosas que decido sacar al mundo”, añadió. “Espero que, si hay niños de 12 años que le han dicho a Instagram que tienen 18 para crear una cuenta, vayan a mi cuenta y no sean explotados por el mundo horrible en el que vivimos”.
