Tras meses de estancamiento, Israel tendrá nuevo gobierno

Una mujer con una pancarta que muestra las imágenes del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu y el líder opositor Benny Gantz en Jerusalén el 14 de mayo del 2020. (AP Photo/Sebastian Scheiner)

JERUSALÉN (AP) — Después de tres elecciones inconclusas y divisivas, un año y medio de estancamiento político y una demora de tres días más por las pugnas internas en su partido Likud por los codiciados puestos ministeriales, el primer ministro Benjamin Netanyahu finalmente rindió juramento en su nuevo gobierno el domingo.

El parlamento israelí aprobó un voto de confianza en el nuevo gobierno de Netanyahu que pone fin a más de 500 días de agitación política.

Durante el fin de semana, tanto Netanyahu como su rival ahora convertido en aliado, Benny Gantz, anunciaron sus nombramientos para la nueva coalición —dando como resultado el gabinete más numeroso en la historia de Israel: 36 ministros y 16 viceministros.

Netanyahu y Gantz, un exjefe militar, revelaron el mes pasado que pondrían a un lado sus discrepancias para sumar fuerzas a fin de guiar al país en medio de la crisis por el coronavirus y sus severas repercusiones económicas.

Su polémico acuerdo para compartir el poder da a Netanyahu el rol de primer ministro durante los primeros 18 meses de gobierno antes de ser reemplazado por Gantz por los siguientes 18 meses. Sus bloques contarán con una cantidad similar de ministros y un poder de veto mutuo sobre la mayoría de las decisiones importantes.

Los detractores de antemano han acusado al gobierno de estar desfasado al crear tantos puestos en el gabinete en un momento que el desempleo en el país se ha disparado un 25% como resultado de la pandemia. Pero debido a que el bloque de Netanyahu incluye varios partidos pequeños, él sólo podrá repartir un número limitado de puestos de ministros entre los integrantes del Likud. Eso generó un pequeño levantamiento de parte de enfadados miembros de alto rango del partido previo a la programada ceremonia de investidura el pasado jueves.

Incapaz de cumplir con el plazo, Netanyahu pidió un aplazamiento a fin de resolver la crisis interna de su partido. Para apaciguar a sus legisladores sin cargo en el gabinete, Netanyahu presentó una serie de nuevos y cuestionables ministerios, como los de “desarrollo comunitario”, “asuntos de asentamientos” y “educación superior y recursos hídricos”, así como un ministro que fungirá como intermediario entre el Parlamento y el gabinete. Cada Ministerio implica tener que cubrir gastos para personal, choferes y una oficina.

Yair Lapid, el nuevo líder de la oposición, dijo que las intrigas han causado una pérdida de “confianza del pueblo israelí”.

“El coronavirus sirve de excusa para un partido corrupto a costa de los contribuyentes. Después de todas las frases vacías respecto a un ‘gobierno de emergencia’, el gobierno que se ha formado hoy es el más numeroso e ineficiente en la historia del país”, aseveró Lapid. “No es solo el derroche, sino el menosprecio. El menosprecio total a la crisis que enfrenta la población israelí”.

El acuerdo de antemano había causado la disolución de la alianza de Gantz y Lapid después de que el primero incumpliera su promesa de campaña de no formar parte del gobierno de Netanyahu, quien enfrenta cargos de corrupción y un juicio penal a partir de la próxima semana. Su acuerdo de coalición, bajo fuerte escrutinio, sólo pudo darse luego que la Corte Suprema del país determinó que carecía de bases legales para impedirla.

Gantz y Netanyahu se enfrentaron en tres amargas campañas electorales a lo largo de un año.

Después de la elección más reciente, en marzo, Gantz parecía asegurar el apoyo suficiente en el Parlamento para aprobar una legislación que habría impedido que el acusado Netanyahu continuara sus funciones como primer ministro. Pero en un inesperado cambio radical de estrategia, Gantz aceptó asociarse con su archienemigo.

La coalición también incluirá un par de partidos ultraortodoxos judíos y algunos otros desertores de su partido. La coalición fue aprobada en una votación por un margen de 73-46, con la abstención de un legislador del Parlamento de 120 escaños.

El principal punto de disensión con los detractores ha sido el puesto recién creado de “primer ministro alterno”.

El cargo, que inicialmente ocupará Gantz, podría permitir a Netanyahu permanecer en el poder incluso después de cederlo a Gantz y durante su juicio por corrupción y potenciales procesos de apelación. También se sospecha que Netanyahu podría decidir no cumplir con su parte del acuerdo de entregar el cargo de primer ministro a Gantz.

Gantz rindió juramento como “primer ministro alterno y futuro primer ministro” inmediatamente después de que Netanyahu se convirtiera oficialmente en primer ministro.

Quien ocupe el nuevo puesto podría gozar de todo el boato del primer ministro, incluyendo una residencia oficial y, algo crucial para Netanyahu, una exención de una ley que exige que los funcionarios públicos que no ocupen el cargo de primer ministro pierdan el fuero en caso de ser acusados de un delito.

Netanyahu enfrenta cargos de fraude, abuso de confianza y sobornos en una serie de escándalos que involucran un presunto intercambio de favores con adinerados magnates de los medios.