Matisyahu insta a la paz en un concierto con pocas protestas

BENICASSIM (Reuters) - El músico judío estadounidense Matisyahu, cuya actuación en un festival de reggae en España ha causado polémica por su cancelación y su posterior readmisión, ofreció el domingo un concierto que transcurrió pacíficamente pese a algunos gritos de protesta a favor de los palestinos. Matisyahu, que fusiona reggae, hip-hop y rock con influencias judías en sus canciones, fue originalmente eliminado del cartel del festival Rototom Sunsplash después de que rechazase pronunciarse sobre el derecho del pueblo palestino a tener un estado propio. La organización reculó y volvió a invitarlo después de un aluvión de críticas de, entre otros, el Congreso Judío Mundial, que reprobó la cancelación de la actuación, y el Gobierno español, que mostró su "comprensión" a las duras críticas de comunidades judías y medios internacionales. En un abarrotado concierto en Benicassim, donde se celebra el festival, decenas de personas silbaron como protesta mientras Matisyahu salía al escenario en las primeras horas del domingo, mientras algunos portaban banderas palestinas y coreaban "¡Fuera, fuera!". Pero muchos otros de los cientos de espectadores aplaudieron al músico a medida que transcurría el espectáculo. "Seas quien seas y vengas de donde vengas, alza tu bandera y ondéala en el aire", dijo Matisyahu a la audiencia antes de su última canción. "Paz, paz, paz", dijo durante su concierto de 45 minutos. "Prefiero no meterme en estos temas de política, prefiero verlo desde fuera", dijo a Reuters la estudiante de 18 años Mónica Uribarri, tras decir que le gustó el concierto. El músico, cuyo nombre real es Matthew Miller, condenó esta semana el intento de "coaccionarlo" para realizar declaraciones políticas" y dijo que la política no forma parte de sus canciones. "Siempre he creído en el poder de la música para unir a todo el mundo independientemente de la religión, la política o la ideología", dijo. La organización del festival, uno de los mayores de reggae en el mundo, pidió al artista inicialmente que se pronunciara sobre la cuestión palestina, en una campaña liderada por BDS País Valencià, que se opone a la ocupación de Israel en los territorios palestinos. Los que pedían el boicot del artista lo hicieron por oponerse a una declaraciones que hizo anteriormente, entre ellas una entrevista en la que dijo que cuestionaba la existencia de Palestina como país, aunque las letras del artista nunca han tenido relación con la política. "Mi propia y profunda fe judía y mi camino personal nunca deberían emplearse como una excusa para politizar mi música o ser utilizada como base para la discriminación", dijo Matisyahu a Reuters tras decidir volver al festival.