Maoríes piden al rey Carlos que intervenga en sus tensiones con el Gobierno de N. Zelanda
Sídney (Australia), 11 dic (EFE).- Un grupo que representa a más de 80 tribus maoríes pidió al rey Carlos que intervenga en la política de Nueva Zelanda, en medio de la creciente tensión entre los pueblos indígenas y las autoridades gobernantes.
En una misiva, publicada este miércoles en exclusiva por el diario The Guardian, el Foro Nacional de Presidentes Iwi solicitó al rey Carlos de Inglaterra, jefe de Estado de la nación oceánica, que intervenga para "garantizar que el gobierno (de Nueva Zelanda) no menoscabe el honor de la Corona".
El colectivo acusa al actual gobierno conservador, que asumió el poder en octubre de 2023, de "violaciones continuas" del Tratado de Waitangi, firmado en 1840 -poco antes de que Nueva Zelanda pasara a formar parte del imperio británico- para regular las relaciones entre la Corona y los maoríes.
"Han iniciado un programa legislativo que redefine de manera unilateral el significado de 'Rangatiratanga'", en referencia a la soberanía del pueblo maorí, denuncia la carta sellada en noviembre, entre otros puntos de conflicto.
Desde que tomó las riendas, el actual Ejecutivo, formado por una coalición de tres partidos de derecha y ultraliberal, ha retirado leyes y abordado reformas que afectan directamente al pueblo maorí, que representan un 20% de los más de 5 millones de habitantes de Nueva Zelanda.
La última de estas controvertidas medidas es el proyecto de ley que busca reinterpretar los principios del Tratado de Waitangi, para, según el gubernamental Partido ultraliberal ACT, garantizar la igualdad de todos ante la ley y evitar privilegios para los maoríes.
El 19 de noviembre, más de 42.000 personas se concentraron de manera pacífica a las afueras del Parlamento en una manifestación histórica contra este proyecto de ley, que fue aprobado a mediados del mes pasado en la primera de las tres lecturas que necesita para convertirse en ley.
La propuesta legislativa ahora está en manos del Comité de Justicia del Legislativo, que lo sopesará durante seis meses. Aunque la principal formación de la coalición, el Partido Nacional, ya retiró su apoyo a la reforma en la siguiente votación.
Los maoríes siguen experimentando discriminación institucional, así como tasas desproporcionadamente altas de pobreza, encarcelamiento, enfermedades, abusos domésticos y suicidios, entre otros problemas.
(c) Agencia EFE